La única empresa que tenía la «Q» de Calidad Turística que exigía el pliego de condiciones le fue gestionada por el propio Ayuntamiento a través del Sistema de Calidad Turística en Destino al que estaba adherido. Empresarios hosteleros tachan el concurso de servicios de playa «irregular» porque la condición indispensable para optar a la adjudicación era estar en posesión de esa «Q» de Calidad Turística, un galardón que solo tienen dos empresas del sector en España y una de ellas es Chiringuitos del Sol.

De hecho, el Ayuntamiento alardea de este distintivo de la mercantil en su web turística. Esta empresa que iba a ser la adjudicataria del servicio, según dio a conocer el edil de Contratación Víctor Ruiz, era la única que cumplía con esta condición y por tanto la que tenía todas las posibilidades de ganar. En este sentido los aspirantes afectados que concursaron argumentaron que la mercantil hizo una oferta de 360.000 euros, solo diez mil euros superior al precio mínimo establecido por el Ayuntamiento cuando esta empresa pagó 720.000 euros en 2006 -Chiringuitos del Sol ha sido la adjudicataria del servicio en los últimos 8 años-. Otras mercantiles presentaron ofertas ahora que alcanzaban los 650.000 euros, aunque sus sobres ni se abrieron en la mesa de contratación por no tener la «Q» de Calidad. Mientras Chiringuitos del Sol pudo continuar adelante con el proceso y pese a que debe 1,1 millón de euros al Ayuntamiento que no quiere pagar. R. V.