La ejecutiva de Nuevas Generaciones del Partido Popular (PP) de Callosa de Segura ha presentado su dimisión en bloque. Su presidente, Francisco José Lillo, ha dejado el cargo realizando graves acusaciones contra miembros de la dirección provincial, a quienes acusa de haber amparado toda una serie de supuestas irregularidades en las elecciones internas, en las que la lista de Manuel Illán se impuso a la de Paco Rodríguez con 152 sufragios frente a 94.

Lillo ha enviado un escrito al presidente del PP alicantino, José Císcar, en el que anuncia su dimisión y dice que «dichas elecciones han sido de todo menos limpias y transparentes». Asegura que «la participación de los afiliados no es real y la dirección provincial ha intervenido decisivamente en que dichas elecciones se hayan celebrado plagadas de irregularidades». El ya expresidente mantiene que se impidió el voto a muchos afiliados, entre ellos su propia abuela, y que se ocultó información a la candidatura de la que formaba parte (la de Paco Rodríguez), así como el acceso a censos de afiliados y de militantes con derecho a voto. Todo ello «mientras la candidatura oficial tuvo acceso a ellos las 24 horas del día».

Para el ya expresidente de Nuevas Generaciones, lo más grave ha sido que la candidatura que finalmente resultó ganadora, encabezada por Illán, «no ha tenido en cuenta para nada a Nuevas Generaciones, hasta el punto que en la encabezada por Paco Rodríguez figurábamos tres miembros de la ejecutiva local y en la de Illán ninguno».

Las críticas de Lillo llegan después de las de Paco Rodríguez, quien aseguró que había impugnado los comicios internos al considerar que la dirección provincial le puso trabas por el sencillo motivo de que él no era el representante que querían para el municipio.

La situación deja un PP del todo dividido en Callosa de Segura, donde los descontentos ya barajan presentarse a las próximas elecciones con un partido independiente. Además, las acusaciones que han vertido contra miembros de la ejecutiva provincial podría conllevar la apertura de expedientes disciplinarios y algunos afiliados podrían acabar siendo expulsados.