La playa de Los Náufragos acogió el segundo simulacro que la adjudicataria del servicio de socorrismo ha realizado este verano a solicitud del Ayuntamiento para comprobar que el protocolo de rescate ante un bañista en peligro funciona perfectamente. Los socorristas atendieron a una persona que sufre un infarto cuando se encontraba en el agua, a unos cien metros de la orilla y a la altura de las rocas en la zona sur de la playa. El protocolo se activaba al visualizar el socorrista al bañista en peligro. Al tratarse de una zona de difícil acceso, el jefe de puesto determinaba la zona por la que debía realizarse la extracción de la víctima recogida por una moto acuática con camilla incorporada. Al llegar a la orilla, los socorristas le han realizado maniobras de reanimación con un DESA (desfibrilador semiautomático) hasta que han llegado los técnicos sanitarios de la ambulancia y han seguido con la asistencia.

Casos

El edil de Playas Javier Manzanares aseguró ayer que Torrevieja cerró el pasado verano por primera vez en su historia un contrato de socorrismo para sus playas, antes se realizaba a través de un convenio. «Una de las prioridades de este acuerdo, que podría estar en vigor hasta 2022, es la formación continua y real de las personas que velan por la seguridad de los bañistas en las playas. De ahí que incluso en pleno verano, se realicen simulacros para que todo funcione al milímetro».

Las situaciones más habituales de rescate con casos graves en las playas de Torrevieja en muchas ocasiones no están ligadas al estado de la mar. Tienen que ver con la avanzada edad de los bañistas y se producen, en buena parte de los casos, a escasos metros de la orilla.