"No sabe si lo que tiene es una casa o la casa del conde Drácula", bromea el agente de la Policía Local de Bigastro, Efrén Pamies, que ha difundido un llamativo vídeo en el que aparece interviniendo para analizar la "invasión" de docenas de murciélagos que se han refugiado en el altillo de una vivienda del municipio. Y es que la casa se ha convertido en una colonia de murciélagos enanos o cumunes que, ya liberados de su habitual aletargamiento invernal, merodean por la ducha, el salón y las dependencias de la casa sin problemas.

El agente, que aparece pertrechado con guantes en las imágenes, explica que el piso es propiedad de un familiar, que le pidió ayuda conociendo su afición a la ornitología y a la fauna autóctona de la Vega Baja -ya ha difundido el rescate de algunas rapaces en el campo de Bigastro- .

Indica que los murciélagos, las 30 especies identificadas en España de este llamativo mamífero alado están protegidas, deben ser retirados de ese espacio porque son muy territoriales y desarrollan una gran actividad nocturna, y aunque no son peligrosos, -se alimentan de insectos que cazan por ecolocalización-, sí pueden transmitir alguna enfermedad, además de albergar en ocasiones otras plagas, como piojos.

Y podrían estar ocupando la vivienda durante años si no se interviene antes, por lo que hay que avisar a una empresa especializada.La familia, una pareja, con su hija mayor, está algo asustada porque los pequeños "bichos" se cuelan por todas las estancias. En el vídeo los murciélagos aparecen de lo más cómodos en medio de una decoración medieval, incluida una armadura.

Hace unos días retiraron una quincena de murciélagos. Ayer otros treinta. El policía que ha difundido esta situación asegura que los rincones y grietas de la casa podrían albergar cientos.

Los murciélagos toman una casa en Bigastro

Los murciélagos toman una casa en Bigastro