Fue el último en anunciar que se presentaba a presidir el PP de Orihuela. Lo hizo después de que Emilio Bascuñana descartara presentarse para centrarse en la alcaldía. El regidor, precisamente, es su principal valedor.
Víctor Valverde se presenta como el candidato a mejorar las relaciones entre los cargos orgánicos del partido y los públicos del gobierno municipal, que se encuentran rotas actualmente. Confiesa ser amigo y leal a Emilio Bascuñana y no le molesta que le señalen como el candidato del alcalde, pero sí que le tachen de ir al dictado de lo que dice éste.
Al concejal de Deportes y Pedanías lo entrevistamos en la antesala de alcaldía donde nos confiesa que es partidario de la bicefalia descartando querer ser alcaldable dentro de dos años.
¿Cómo ve sus posibilidades como candidato?
Muy ilusionado porque la respuesta está siendo magnífica y con satisfacción de luchar por algo que la militancia de base cree que hay que mejorar. Estoy muy esperanzado.
¿Por qué decidió dar este paso?
Llevo muchos años y se ha estado prometiendo que el partido va a funcionar y hasta el momento no ha sido así. Algunos sólo se acuerdan de los militantes y simpatizantes en los períodos electorales y hay que darles voz en el partido, que debe ser un órgano vivo, abierto. En su día eché en falta un partido más abierto.
¿Qué es lo que no le gusta de lo que ha visto hasta ahora en la ejecutiva del PP?
A nosotros que estamos en el gobierno de Orihuela con 11 concejales cargados de áreas nos vendría muy bien que, desde el partido, nos ayudaran a preparar mociones y sugerencias de los ciudadanos y las canalizaran a través de nosotros y no se hace. Ese cierre de puertas de sede que ha hecho la actual presidencia a los militantes.
¿Cuáles serían las primeras medidas que adoptaría si sale elegido?
Establecer la ejecutiva sólo con personas comprometidas, no que vengan al partido a beneficiarse personalmente sino que estén dispuestas a trabajar. Quiero crear comisiones de trabajo y, por supuesto, estrechar lazos con el equipo de gobierno, ofrecerles la ayuda del partido.
¿Integraría en su ejecutiva a componentes de las otras listas?
Por supuesto. Somos todos compañeros. En las tres candidaturas hay personas muy involucradas con el partido que vienen a trabajar y, por circunstancias, han tenido que posicionarse en una candidatura.
El alcalde, Emilio Bascuñana, apoya su candidatura. ¿Se ve cómodo con el papel de ser el candidato del regidor?
Es algo que me toca llevarlo. No tengo que esconder mi buena relación con Emilio, no de ahora sino de hace tiempo. Cuando fui integrante de su lista no venía de ninguna familia política y me acogió. Yo tengo una cierta edad y he procurado siempre tomar mis propias decisiones, escuchando a los demás. Pero no soy una persona que se deja llevar ni manipular. No soy la marioneta de nadie.
¿Qué les dice a los votantes del PP?
Que voten al que crean que hará un partido más fuerte. Hay que hacer un PP abierto, vivo, que es lo que la militancia quiere.
¿Sus aspiraciones políticas pasan por la alcaldía?
Yo no pretendo estar en la alcaldía de Orihuela. Descarto ser el candidato en 2019. La presidencia del partido la debe ostentar una persona diferente al alcalde y no se pueden mezclar.
