El pleno del Ayuntamiento de Torrevieja «tomó en consideración» ayer la moción presentada por Sueña Torrevieja (ST) para que se informe por parte de los técnicos municipales su propuesta de que La Mata sea considerada entidad local menor. Votaron a favor de la moción los diez concejales del equipo de gobierno de coalición (Los Verdes, PSOE, APTCe e IU) y los dos concejales de Sueña Torrevieja. En contra, los once concejales del Partido Popular. La abstención de las dos ediles de Ciudadanos permitió que la iniciativa lograra la mayoría.

¿Qué significa que la moción «se va a tomar en consideración»? Los técnicos informarán ahora sobre si desde el punto de vista jurídico esta población podría alcanzar la consideración de entidad local menor. Una condición situada, administrativamente a medio camino entre pedanía y municipio, que permite a sus vecinos gestionar sus asuntos, e incluso contar con propio presupuesto. Hasta ahí la teoría. En términos políticos todas las formaciones, a excepción de Ciudadanos que nunca sabe lo que va a hacer hasta el momento de levantar la mano, tenían una estrategia definida en el pleno.

Sueña Torrevieja respaldar a los vecinos de La Mata. Un grupo numeroso de vecinos, la Plataforma Independiente Matera, pero no mayoritario, que exigen esa autonomía por razones históricas y de reconocimiento de una identidad propia, que ahora, tras consentir un proceso de urbanización salvaje en su ámbito durante más de tres décadas, echan de menos.

El PP argumentó su voto en contra recordando que los escasos pronunciamientos de los técnicos sobre la condición de La Mata como población distinta al resto del casco urbano de Torrevieja ya anticipan que no ni tan siquiera es una pedanía, ni una población distinta.

Es el caso de un informe de la Concejalía de Educación que denegaba una ayuda de comedor recordando, con fotos aéreas precisamente que La Mata sí era un núcleo de población distinto a Torrevieja hace sesenta años, pero no ahora. Donde antes había una franja de seis kilómetros de dunas, viñedos y campos de secano, ahora hay una enorme conurbación de miles de viviendas que unen por la costa Torrevieja y La Mata.

La legislación que regula la consecución de las entidades locales menores aclara textualmente que no son posibles para poblaciones que no estén separadas claramente por una franja de suelo no urbanizable con la población de la que dependen. Eduardo Dolón lamentó que se estén generando expectativas a unos vecinos que, a su juicio, se están movilizando en los últimos dos años porque se sienten abandonados por el gobierno de coalición de izquierdas.

La posición del grupo de gobierno la defendió José Hurtado (Los Verdes), con el respaldo de Víctor Ferrández (IU). Hurtado quiso dejar claro que el equipo de gobierno iba a tomar en consideración la propuesta porque está a favor de que se estudien y analicen las propuestas, lo que no significa que la iniciativa vaya a salir adelante. De hecho, el grupo de gobierno no perdía nada ayer. Apoyaba a su antiguo socio de gobierno, Sueña Torrevieja, en una semana en la que se había «sentado con el PP» por primera vez. Incluso si los técnicos ven un resquicio a la posibilidad de que La Mata se convierta en entidad local menor, el procedimiento tiene todas las papeletas para no prosperar: por la complejidad que requiere el expediente posterior - muchas pedanías de la Vega Baja intentan, sin éxito desde hace décadas-; y la falta de un apoyo mayoritario a la autonomía matera por parte de sus propios vecinos.

¿Qué va a hacer Ciudadanos?

La postura más desconcertante la sostuvo la edil Pilar Gómez Magán. Durante todo el debate estuvo reclamando que el asunto quedara sobre la mesa. Dio a entender, aunque sin decirlo, que su voto iba a ser en contra: cuestionó que muchas mociones de la oposición no tengan la suerte de ser debatidas en pleno como la de ayer -algo que depende de la secretaria-. En el momento de votar, tras conocer el posicionamiento de voto de todos los grupos, se abstuvo. Lo mismo hizo su compañera, Paqui Parra. Lograron lo importante en Cs Torrevieja. Votar lo mismo sin desentonar. Y de paso dieron oxígeno a un proceso que tenía pocos visos de contar con el respaldo suficiente.

Momento de la votación en el pleno