La sección VII de la Audiencia, con sede en Elche, juzga mañana martes a tres hombres, uno de ellos responsable de una empresa agrícola de Orihuela, acusadas de estafar a 75 inmigrantes durante los años 2004 y 2005 a los que ofrecían trabajo y pedían hasta 2.000 euros para tramitarles los permisos de residencia.

El gerente de la empresa, dedicada a la recolección de fruta, ofrecía a los ciudadanos extranjeros una oferta de empleo y, según mantiene el fiscal, les proponía la tramitación de los permisos necesarios para residir y trabajar en España, a cambio del pago de diferentes cantidades de dinero para abonar gastos burocráticos, cuotas de la seguridad social u otros conceptos. Las cantidades que demandaba oscilaban entre los 400 y los 2.000 euros.

Los otros dos acusados se encargaban de contactar con las víctimas y realizar parte de los trámites. El fiscal pide penas que oscilan entre los nueve meses de cárcel y siete años y ocho meses de prisión por los delitos de estafa y contra los derechos de los trabajadores.