Lo habitual es que sea un particular o una entidad la que recurra a la Sindicatura de Agravios para apretarle las tuercas a la administración de turno -cuando marea la perdiz o no atiende una queja o reclamación sobre el (mal) funcionamiento de un servicio público- y que por derecho, debe ser escuchada. Y la mayor parte de las veces sirve para poco. Pero en este caso, no.
Ha sido una promotora y constructora, Moorstyle la que ha recurrido al equivalente al defensor del Pueblo en la Comunidad Valenciana para que le dé la razón y, casualmente, vea desbloqueado la exposición de la modificación de un estudio de detalle para urbanizar una de las últimas manzanas 29 en el sector 25 de Torrevieja -92 viviendas sobre 14.000 metros cuadrados-.
La historia se remonta en septiembre de 2014 cuando la empresa presentó la propuesta para que se tramitara la urbanización de la parcela al anterior equipo de gobierno. La firma es propietaria de una manzana urbana en sector -ubicada cerca de la Avenida de las Cortes Valencianas y la rotonda de acceso a la Avenida de Monge y Bielsa, y que es uno de los que se está colmatando más rápido desde que se recuperó la actividad constructora.
La empresa presentó la propuesta para que se tramitara la urbanización de la parcela con algunas modificaciones en la tipología de las casas. Hasta ahí todo normal. Es un procedimiento reglado y no debería haber supuesto un problema para la administración con el récord español en concesión de autorizaciones urbanísticas en la pasada década del boom inmobiliario. El trámite contó con visto bueno ambiental en febrero de 2015. Pero quedó paralizado por «deficiencias», en el estreno del nuevo equipo de gobierno en agosto de 2015. Tras subsanar las deficiencias la junta de gobierno de octubre de 2015 lo dejó sobre la mesa. Ha tenido que pasar más de un año. En abril la Sindicatura remitió la queja al alcalde «recomendandole» que actuara y este mes el plan se ha desbloqueado.
La edil de Urbanismo, Fanny Serrano justificó ayer que no se le dio el visto bueno al hecho de que la representante de la junta de gobierno del PP, que en ese momento actuaba de oyente -hace meses que fueron expulsados de este órgano colegiado por la coalición de gobierno-, advirtiera supuestamente de que ese mismo urbanizador no había concluido zonas verdes en el mismo sector.
Serrano asegura que se tuvo en cuenta esa advertencia -de quien es el enemigo político número uno del gobierno- porque acababan de aterrizar en la gestión municipal.
