La primera edición de las Jornadas de residentes europeos organizada por el Ayuntamiento de Guardamar del SeguraGuardamar del Segura no recibió ayer la afluencia esperada. La iniciativa estaba destinada a fomentar la convivencia entre los diferentes colectivos del municipio y a facilitarles recursos de información y asesoramiento, pero a las 11 horas no había más de 50 personas. El escaso seguimiento da cuenta del problema que tienen muchos municipios a la hora de conseguir que los vecinos de origen internacional se empadronenempadronen. En esta localidad se calcula que hay al menos 800 personas residiendo de forma continuada pero sin registrar en el Consistorio.
El encuentro celebrado ayer incluyó mesas redondas para abordar temas como «Recursos sociales desde los equipos base de Servicios Sociales»; «Recursos sanitarios en la Comunidad Valenciana» o «Requisitos, condiciones y ventajas del empadronamiento». Había hasta una paella gigante y música en directo, pero ni aún así.
El edil de Bienestar Social e Integración, José María Hernández, detalló ayer que en Guardamar hay aproximadamente 6.000 vecinos empadronados, de los cuales un 30% son residentes de origen internacional, en su mayoría británicos. Además, calculan que hay unos 800 más sin registrar. Ello supone un perjuicio para el municipio, principalmente porque se reciben menos transferencias económicas del Estado, pues las cantidades se envían en función de la población. «Muchos son residentes que se han empadronado cuando han necesitado hacer alguna gestión, pero no han renovado después el empadronamiento», apuntó el concejal, quien dijo que el Consistorio seguirá trabajando para fomentar esos empadronamientos. El edil señaló que es importante incidir en los recursos a los que pueden acceder estando registrados y dar a conocer además el servicio de la oficina desde donde los no comunitarios pueden tramitar sus permisos de residencia o de trabajo.
Derechos fundamentales
A la reunión de ayer acudió el delegado del Consell para la Unión Europea y Relaciones Externas, Joan Calabuig,quien recordó que la ciudadanía de la Unión Europea garantiza derechos fundamentales como el de la libre circulación, lo que permite la posibilidad de estudiar, trabajar o residir en cualquier lugar del territorio europeo; así como el derecho de protección por las autoridades diplomáticas y consulares de cualquier país de la Unión cuando el ciudadano se encuentre en un tercer país donde el suyo no tenga representación.
«Estas jornadas contribuyen a intensificar la comunicación y las relaciones entre el Consell y las diferentes asociaciones de ciudadanos procedentes de otros países en la Comunitat. Los residentes europeos siempre van a contar con el apoyo del Gobierno de la Comunitat Valenciana para garantizar sus derechos y asegurar los servicios públicos que necesiten», expresó por último ayer Calabuig.
