La alcaldesa de Albatera, Rosario Ballester (UPyD), notificó ayer a la secretaria municipal su baja por enfermedad, lo que obligó a la fedataria pública a llamar a la primer teniente de alcalde, Rosa Guillén (PSOE), para notificarle este hecho y la necesidad de que acudiera al Ayuntamiento a firmar porque, en caso contrario, la actividad se paralizaría. Así lo confirmó la socialista a este diario.

Ballester pidió la baja el mismo día que INFORMACIÓN publicaba que un juzgado de Orihuela ha decidido abrir una investigación por cuatro delitos tras una querella entre los propietarios de dos terrenos después de que la regidora le concediera a uno de ellos dos licencias de obras sobre un suelo que el otro entiende que es suyo, lo que ha documentado en el Ayuntamiento sin que se le escuchara, por lo que acudió a los tribunales a defender su patrimonio. Las diligencias se dirigen contra Rosario Ballester y contra el otro propietario. La alcaldesa negó a preguntas de este diario el pasado miércoles cualquier irregularidad con respecto a este asunto y dijo que siempre ha estado avalada su gestión por los técnicos. Pero al mismo tiempo se mostró muy enfadada y amenazó con querellarse por este asunto a «quien dijera que estaba imputada» (sic). Rosario Ballester aún no ha sido citada a declarar pero le consta la existencia de las diligencias por los supuestos delitos de prevaricación, tráfico de influencias, apropiación indebida y contra la ordenación del territorio.

Convulso

El municipio vive un momento convulso porque el próximo día 21 Rosario Ballester tendría que dimitir para devolver la Alcaldía a Rosa Guillén cumpliendo el pacto que se firmó a principio de mandato por el cual la portavoz socialista estaría el primer, tercer y cuatro años y la portavoz de UPyD, el segundo. A día de hoy no consta que Ballester haya presentado la renuncia o haya convocado el pleno y, aunque Rosa Guillén no tiene garantizado los votos, considera que el pacto debe cumplirse, aseguró ayer al periódico. Es decir, tendría que haber una votación só o sí. Y el PSOE no tiene los votos garantizados porque una de las concejalas socialistas, Mila Pérez, decidió marcharse del equipo de gobierno al no estar de acuerdo con la gestión y al asegurar que se incumplía el programa. De este modo, para el caso de que se convoque el pleno, el Partido Popular podría recuperar la Alcaldía porque votaría al unísono a su candidato, a Federico Berna. En Albatera hay 17 concejales y PSOE, Cs y UPyD sumaron en aquella votación 9 (6,2 y 1, respectivamente) apoyos, aunque Ciudadanos no entró en este pacto por la Alcaldía. Mientras, Federico Berna se quedó en 8 concejales. Es decir, hay 8 contra 8 y Mila Pérez podría decantar la balanza o simplemente abstenerse, lo que también haría alcalde a Berna porque la suya fue la fuerza más votada. Hay que saber también qué papel le queda por jugar a Ciudadanos en Albatera viendo cómo están las cosas.