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Orihuela

El Ayuntamiento baraja sacar una réplica del Oriol el «Día del Pájaro» tras ser declarado BIC

La intención del equipo de gobierno es utilizar, a partir de 2018, la copia que se guarda en Las Salesas por el deterioro que sufre la enseña original de 1594

El descenso de la Gloriosa Enseña del Oriol del balcón consistorial se repite cada 17 de julio. tony sevilla

El equipo de gobierno de Orihuela (PP y Cs) se plantea que el original de la Gloriosa Enseña del Oriol deje de salir cada 17 de julio a las calles de Orihuela en el llamado «Día del Pájaro» tras ser declarado el pasado viernes Bien de Interés Cultural (BIC) Bien de Interés Cultural en la categoría de bien mueble de carácter individual, lo que sucedería a partir de 2018. Lo que baraja el Ayuntamiento es utilizar ese día la réplica que se encargó en 2006 para, precisamente, sustituir en ese acto festivo a la enseña original para evitar su deterioro. La copia, que costó 29.000 euros y la realizó un taller sevillano especializado en estandartes de Semana Santa, se conserva en el Monasterio de Las Salesas y uno de los principales problemas que se encontró tras su entrega es que pesaba demasiado por lo que se tuvo que restaurar años después.

El portavoz del equipo de gobierno, Rafael Almagro, explicó a INFORMACIÓN que la enseña original se encuentra deteriorada «porque se le nota el paso del tiempo y habrá que conservarla mejor». En este sentido señaló que «llegará el momento que habrá que hacer el traspaso de la original a la réplica» y que tras su declaración como BIC «es un buen momento para hacer ese cambio y estamos valorando hacerlo».

Si bien Almagro indicó que es sólo un día al año cuando sale a la calle, mostró su preocupación por dejar la bandera un día a la intemperie «expuesta al sol y al calor y los riesgos de que en el desfile pudiera caerle agua o cualquier otro líquido». Preocupa, sobre todo, el estado de conservación de los bordados que tiene la enseña, de 1594. Junto a ellos luce un oriol de plata sobredorada de 1732 coronando el mástil de madera y telas del siglo XX.

Ceremonia

El cambio del original a la réplica no es tan sencillo. Según fuentes consultadas, para que la réplica pudiera desfilar el «Día del Pájaro» es necesario realizar una ceremonia de traspaso de poderes de la antigua a la nueva.

La exalcaldesa, Mónica Lorente, lo intentó en 2009 pero cesó en su intención al ser obligatorio celebrar una ceremonia de la que hay muchas lagunas sobre cómo debe ser. Sólo se tienen referencias de actos similares en el ámbito militar y con componente religioso. Aunque la mayoría de los antecedentes de banderas y portaestandartes son militares y Orihuela tiene un reglamento de honores y distinciones caducado desde la década de los '50, en su día hubo cierta unanimidad en torno a que el acto que le faltaba al Pájaro de Orihuela es un traspaso de poderes que debería efectuar el presidente de la Generalitat, aunque en última instancia es el área de Protocolo del Ayuntamiento quien debe aclarar cómo realizar ese traspaso. Tienen un año por delante para hacerlo.

El presidente de la Asociación de Fiestas Santas Justa y Rufina, Pepe Vegara, señaló a este diario que el cambio «no es ahora un debate que esté en la calle» y dijo que pulsará el sentir de los festeros.

Un día al año

La bandera, que data de 1594, sólo se expone un día al año al público, durante las 24 horas del 17 de julio. Desciende por el balcón del Consistorio para iniciar un desfile por las calles de la mano del Síndico del Oriol y de los concejales del Ayuntamiento que cogen cada una de sus cintas. Tras su tradicional reverencia ante el altar de la Iglesia de las Santas Justa y Rufina (ya que sólo se inclina ante Dios y ante el Rey) vuelve a subir y se mantiene en el balcón para entrar al Ayuntamiento de nuevo a las doce de la noche. Y allí permanece el resto del año en una sala que lleva su nombre y que, según el gobierno municipal, mantiene una temperatura idónea dentro de la vitrina donde se encuentra.

Tras la declaración de BIC surge otra disyuntiva: elegir una u otra para ser expuesta al público de manera más continua, ya que los Bienes de Interés Cultural deben poder ser visitados para potenciar su carácter turístico.

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