El gobierno local de Bigastro, liderado por Teresa Belmonte, defendió ayer que los nuevos presupuestos, de algo más de cuatro millones, están basados en unas previsiones económicas «basadas en la contención del gasto y donde se busca la mejora de la eficacia de la gestión municipal». Apuntan que las partidas que cuentan con movimientos para este año «se centran en los Servicios Sociales y en inversiones con financiación afectada, como la que se espera obtener para modificar el polígono industrial Apatel». En las cuentas «se establecen partidas para dotar de una ruta medioambiental que beneficie el plano turístico en el municipio. Asimismo, se establece un aumento de fondos económicos para prestar servicios sociales con nuevo personal, así como el incremento para ayudas para diferentes colectivos locales. Como novedad se fija una reserva de 4.500 euros para ayudas a becas del transporte universitario y otra para la elaboración de un Plan de Dinamización municipal». Otras inversiones previstas se centran en el asfaltado de calles, el desarrollo del plan de accesibilidad o la remodelación integral del polígono industrial. Todo ello «sin subir ningún impuesto directo», remarcó la alcaldesa.