La segunda fase de reforma de Los Andenes ha comenzado a causar mella en muchos negocios que prevén un verano muy duro, con poca clientela. Ayer, Cambiemos Orihuela denunció que el Ayuntamiento ha «abandonado a su suerte» al comercio y la hostelería porque «avisó con muy poca antelación a bares y comerciantes del inicio, lo que ha provocado mayor perjuicio económico».
La remodelación se financia gracias a la Diputación que pone 800.000 euros. «No se trata de cuestionar la necesidad de remodelación sino la planificación y ejecución de la misma. Queremos denunciar lo que, para nosotros, supone un síntoma de la dejadez y falta de políticas públicas en materia de comercio local», explicó Bernabé. Según el edil, el Gobierno de Orihuela notificó con apenas cuatro días de margen a numerosos hosteleros de la necesidad de retirar terrazas y desmontar pérgolas. «El aviso llegó en plena Semana Santa -en algunos casos la comunicación no llegó hasta el 13 de abril-, lo que podría haber provocado problemas a pequeños comercios cuya supervivencia puede verse comprometida con este tipo de inconvenientes. La notificación anunciaba que no habría «ningun derecho de indemnización».
