La Diputación Provincial ha expuesto al público el proyecto de obras para la rehabilitación del firme la de carretera CV-954, que discurre en paralelo a la umbría de la zona protegida de Sierra Escalona. La Asociación de Amigos de Sierra Escalona (ASE) va a alegar en contra del proyecto porque no se puede ejecutar sin que cuente con esa evaluación de impacto ambiental favorable. El colectivo ya ha podido confirmar que la propuesta carece de ese requisito previo, sin el que no podrá, legalmente, adjudicarse la obra.

Esta carretera es la que une Torremendo con la vecina Región de Murcia, y recorre una de las zonas mejor conservadas del paraje, alejada de la costa y de los procesos de urbanización, entre bancales de almendro, matorral y el pinar de la sierra. Pese a su escaso tráfico, también es uno de los viales en los que más se documentan atropellos de rapaces todos los años. El anuncio público de la institución provincial no justifica el motivo o el objetivo del proyecto para este gasto de más de 400.000 euros en apenas un tramo de 3 kilómetros. Aunque sobre el terreno lo que parece que va a permitir es mejorar la conexión con la subestación eléctrica de grandes dimensiones, que acaba de ponerse en marcha en el paraje. Planta que da servicio a la desalinizadora de Torrevieja. La carretera, un vial poco conocido, enlaza con la Cv-925 y de ahí con la CV-95 a Torrevieja, Orihuela o la autovía.

La inversión de esa cifra no deja de resultar llamativa en uno de los viales con menos tráfico de toda la comarca de la Vega Baja: ni tan siquiera aparece recogido en el mapa de aforos de la Generalitat, en el que se estima el paso diario de tráfico por cada tramo de la red.

ASE se pregunta cómo es posible que la administración no haya tenido en cuenta la afección de toda la actuación a la protección de la zona como Red Natura y como Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA).