«850 euros que sólo sirvieron para una foto». Es la conclusión que saca el concejal socialista de Orihuela, Víctor Ruiz, tras comprobar que el mural de azulejos con el poema «El Nazareno» que Bascuñana leyó e «inauguró» en Semana Santa, coge polvo en el almacén municipal. La fachada de la casa de la Archicofradía de la Virgen de Monserrate luce aún vacía a pesar de que el regidor anunció que allí se colocaría. «Lleva más de un mes arrumbado en el almacén de la brigada municipal sin que al alcalde se le caiga la cara de vergüenza», señaló Ruiz.
El mural está compuesto por 54 azulejos en los que se ha plasmado el poema «El Nazareno» de Miguel Hernández y que se descubrió el Miércoles Santo. Su presentación pública no estuvo exenta de polémica. El alcalde llegó tarde al acto y la procesión de Nuestro Padre Jesús Nazareno tuvo que esperarlo a las puertas del templo para que, a su llegada, leyera los versos escritos en el mural cerámico por megafonía. Un hecho inusual que molestó a muchos penitentes.
«El Ayuntamiento pagó 850 euros por tener listo el mural para presentarlo, y al día siguiente, lo guardaron y lleva allí un mes», criticó el edil socialista quien, además, recordó que ningún concejal de la oposición fue a ese acto institucional con motivo del 75 aniversarios de la muerte del poeta «porque no fuimos invitados». «Cada foto de Bascuñana nos cuesta un ojo de la cara».
Convenio
El problema que tiene el Ayuntamiento de Orihuela para colocar el mural es, simplemente, que el lugar escogido para su instalación no es municipal y, por lo tanto, el Consistorio debe firmar un convenio con los propietarios, en este caso la Archicofradía de la Virgen de Monserrate.
El Consistorio sí solicitó autorización para instalar los azulejos a la Conselleria de Cultura al tratarse de un edificio que está declarado Bien de Interés Cultural. Fue el 7 de abril, una semana antes de su presentación pública, y consiguió una respuesta rápida, el día 11, autorizando su colocación, pero esta autorización estaba condicionada «a la ejecución de las obras necesarias para recuperar los valores patrimoniales ambientales de la fachada, sobre la base de un proyecto técnico de intervención que deberá presentarse a esta misma administración para su preceptiva autorización». Sin embargo, los trabajos los tiene que realizar la archicofradía que es la titular del inmueble donde se tiene pensado colocar el mural cerámico.
Para Víctor Ruiz este hecho «es una tarea compleja y el equipo de Gobierno de PP y Cs se gastaron 850 euros sólo para hacerse una foto, porque ese mural no estará expuesto, muy probablemente, en lo que queda de año hernandiano», lamentó.
Ahora el Consistorio deberá llegar a un acuerdo con la Archicofradía de la Virgen de Monserrate para que asuma el proyecto de rehabilitación de la fachada de la casa que está junto a la Iglesia de Monserrate, en la plaza del mismo nombre. «Ha pasado lo mismo que con la plaza de toros, han vendido la piel del oso antes de cazarlo», señaló Ruiz. «O han sido lentos y torpes, o son unos manirrotos», concluyó el edil.
