Lejos de la polémica por el cambio de uso de la parcela urbana de hotelera a residencial frente al hospital privado, los representantes del gobierno y la oposición coincidieron en una comisión informativa de urbanismo previa al pleno de hoy en dar el visto bueno a la petición de un promotor para ganar alturas -de dos a cuatro- en un residencial previsto en la zona de Los Altos. Ni el equipo de gobierno, ni el grupo mayoritario del PP, han explicado su voto favorable a esta reclamación, que ya contaba, antes de llegar al pleno, con la evaluación ambiental favorable del Consell, como ya avanzó este diario en agosto de 2016.

El cambio, reglado normativamente, no es para permitir promotor realizar más casas. El visto bueno sirve para realizar una distribución distinta de la edificabilidad.El realizar torres de cuatro alturas permite -con el mismo número de viviendas final para todas las parcelas-una distribución de espacios comunes de mayor calidad.

La propuesta llega de la mano del constructor oriolano Francisco Pedrera para que los edificios a situar al sur de Torrevieja, lindando con Orihuela Costa, se eleven hasta los 14 metros, el doble de los previstos inicialmente. Y lo hace asumiendo los argumentos del constructor en los que asegura que el modelo anterior a la crisis, -que todo el sector en la Vega Baja, incluida la firma solicitante, explotó de forma intensiva durante casi tres décadas hasta el pinchazo del ladrillo- es «agobiante (sic) (...) con una utilización intensiva del suelo (...) lo que provoca una ordenación no demasiado favorable en cuanto a vistas y espacios libres (...) y con una importante sensación de masificación en la edificación». Algo que provoca que los espacios libres privados destinados a juegos, deportes, piscinas y aparcamiento «sean mínimos», dice.