La ordenanza de uso de las instalaciones de deportes es un auténtico «galimatías» que ahora se pretende ordenar con una simplificación del texto, según explicó ayer el concejal Víctor Ferrández. Entre otros aspectos, solapados e incorporados entre 2004 y la actualidad figuran, por ejemplo, diferencias de precio entre los censados y no censados, que van a desaparecer porque los técnicos aseguran que no son legales. También desaparece la posibilidad de establecer convenios específicos con entidades deportivas para acceder las instalaciones, algo que los funcionarios también consideran irregular. Como alternativa se pondrá en marcha un proceso reglado para acceder a exenciones.

El nuevo texto, que no supone un incremento de las tasas, avanzó el concejal, se va aprobar en junta de gobierno el viernes, y no exige una exposición pública porque es una actualización y no una nueva ordenanza. El edil explicó que ayer mismo iba a informar a los colectivos afectados y usuarios de las dependencias municipales sobre las novedades incorporadas a la ordenanza.