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La jornada de «mona» llena las pinadas y playas de la comarca

Jornada con más de 20 grados que animó a muchos a darse un chapuzón a la espera de que bajen las temperaturas

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Nuevo día de mona, playa y campo en la Vega Baja

Miles de vecinos y visitantes procedentes de otras zonas como Murcia aprovecharon ayer la última jornada festiva de estas vacaciones de Semana Santa para darse un baño de sol en el campo, y cumplir con la tradición de la mona y el chocolate -y los más atrevidos también de mar, el primero de la temporada-.

San Vicente Ferrer sigue marcado como fiesta local en el calendario anual. Era el caso de Albatera, Benijófar, Bigastro, Almoradí, Torrevieja, Jacarilla, Daya Vieja, Daya Nueva, Algorfa, o Callosa de Segura. Muchos acudieron a disfrutar de la playa, huerta, pinada o el campo, con el mejor ambiente primaveral, con un sol radiante, brisa suave y el termómetro superando los 20 grados, aunque las temperaturas bajarán para el fin de semana.

Todo antes de asumir de nuevo la rutina laboral y escolar, que ya probaron los vecinos de Guardamar, Orihuela o Pilar de la Horadada, y otros poblaciones de la Vega, que han optado por prescindir de esta jornada como festiva, en la mayoría de los casos para completar sus celebraciones patronales.

Zonas preferidas

Las pinadas de Guardamar y el parque natural de La Mata y Torrevieja, en Lo Albentosa- parque municipal en el que han acampado más de dos mil personas durante los últimos días-, o los parajes de la Pilarica y Cueva Ahumada, en las faldas de la Sierra, en Callosa de Segura, por ejemplo, o la Pedrera en Bigastro, el Recorral en Rojales, volvieron a convertirse en campamentos improvisados y fueron el mejor rincón para ese pequeño experimento de vida rústica en el que se convierte cada año estas salidas de Pascua.

Almuerzos interminables con las mejores viandas -eso sí, en la mayoría de zonas se ha desterrado cualquier fuego, aunque sea en zonas habilitadas-, juegos, y cómo no, la mona y chocolate siguen siendo los protagonistas. Pese al paso del tiempo y que la tradición había decaído durante los últimos años -, las zonas de recreo de la comarca se llenaron de familias y grupos amigos.

Las playas de Los Locos y El Cura lucían ayer un aspecto inmejorable en Torrevieja, sin la masificación veraniega, pero con una gran animación que daba pie a algunos a darse un chapuzón. Con ese espacio también había margen para organizar un día de playa completo: también para almorzar y pasar la jornada completa junto al mar.

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