La edil del PP, Inmaculada Montesinos, ha expresado hoy de nuevo "su sorpresa y perplejidad" ante las actuaciones del alcalde de Torrevieja José Manuel Dolón en materia de Tercera Edad. La oposición "siempre ha puesto en duda" que el argumento del primer edil de que las ayudas no eran legales para dejar de distribuirlas.
Este miércoles la edil ha hecho referencia a varios informes, que en su opinión, refuerzan las tesis del PP de que eran legales. "Hemos podido comprobar que este señor (el alcalde)" exponía en los escritos remitidos a las distintas administraciones para consultar la legalidad de las ayudas entre las que se encontraba la dirección general de Administración Local, la dirección General de Servicios Sociales y personas en situación de Dependencia o la Junta Superior de contratación administrativa.
En esas solicitudes se indicaba que desde el año 1994 y durante más de 30 años, el Ayuntamiento abonaba a los pensionistas y jubilados del municipio la denominada ayuda individual para pensionistas y solicitaba informe sobre la legalidad de la medida, "si se ajusta y cumple con todos los requisitos de no duplicidad y si, consecuentemente con todo ellos, puede este Ayuntamiento de Torrevieja seguir facilitando el pago de dicha ayuda".
Montesinos ha mostrado las contestaciones e informes remitidos por algunas de estas administraciones y es "sorprendente", a jucio de la edil, "que en ninguna de ellas se diga que las paguicas entregadas por el Partido Popular durante 30 años sean ilegales". Para la concejal lo que dicen esos informes acredita que el objetivo final del primer edil era "acabar" co las ayudas "que tanto criticó" cuando estaba en la oposición.
Subdelegación del Gobierno
El alcalde aludió a una resolución distinto a los que ha hecho referencia la edil para justificar una decisión, que aseguró, venía condicionada por un informe en contra de Intervención a seguir distribuyendo las "paguicas", en torno a unas 1.200 ayudas de 400 euros.
La Subdelegación del Gobierno a petición del alcalde y después de analizar el informe en contra de Intervención, concretó que las ayudas no podían otorgarse como subvenciones porque no quedaba nada claro qué era lo que subvencionaban. En segundo lugar, la Subdelegación aseguraba que ese tipo de ayudas no eran una competencia propia de una administración local.
El primer edil, al anunciar su decisión recordó que en este mandato el Ayuntamiento precedió a entregar las ayudas tramitadas en 2015, suprimiendo el ritual habitual de entrega en mano por parte de un político en el salón de plenos, habitual desde 1994, y pasar a transferir el importe directamente a una cuenta bancaria del beneficiario.
Como alternativa a la supresión de las paguicas el alcalde dijo que se pondrían en marcha otras más equitativas y legales que respondieran a peticiones para sufragar gastos concretos de las personas mayores justificados, como gafas, ortopedia, estancias en centros de día, entre otros muchos conceptos, y que todavía no se han impulsado.
