La ubicación de la planta de transferencia de Orihuela sigue siendo una incógnita. La Generalitat ha señalado cinco posibles emplazamientos pero el Ayuntamiento, presidido por Emilio Bascuñana, guarda silencio sobre este tema, al menos de cara a la galería.

En el proyecto inicial redactado por Vaersa se señala que la planta de Orihuela todavía no tiene emplazamiento definido, aunque se indica que se situará en una parcela industrial del municipio con cinco posibilidades. Una de ella es la zona cercana al casco urbano de La Aparecida, junto a la N-340, y relativamente próxima a un colegio público. Otra de las zonas se sitúa entre el casco urbano de Orihuela y el Raiguero de Bonanza, también junto a la N-340. La tercera de las opciones, y quizá la más factible, es la zona industrial junto a esa misma carretera nacional en el punto ubicado entre El Palmeral y el barrio de San Carlos, que incluye el polígono Puente Alto. Hay terrenos aptos a la lado y lado del vial y es la zona más amplia. Cuenta a su favor con que tiene un enlace con la autovía muy cercano.

Peor carretera

La cuarta de las opciones es la del polígono que hay a la salida hacia Torrevieja desde Bigastro. Esta opción tiene el problema de estar pegada al casco urbano de Bigastro y una carretera que no reúne las mejores condiciones para el desplazamiento de camiones. La quinta opción es el polígono emplazado a espaldas de la estación intermodal de Orihuela, al otro lado de la nueva vía del AVE, pero que está quizá demasiado pegado al casco urbano.

Aunque desde la Generalitat siempre han señalado su disposición para llegar a acuerdos con el Ayuntamiento de Orihuela, lo cierto es que si la negociación no llega a buen puerto el Consell podría llegar a obligar a su instalación aunque el Consistorio no quiera.

Por parte de Guardamar, donde se ubicará otra planta, sí está claro el emplazamiento. Se situará en la partida del Pallaret, en los terrenos del antiguo vertedero de residuos inertes y próximo a la Estación Depuradora de Aguas Residuales. Dicho suelo está calificado como dotacional y sería apto para una instalación de este tipo.

En paralelo, la Generalitat se ha comprometido con el Ayuntamiento de Guardamar a realizar un proyecto para regenerar el terreno que ocupa ese antiguo vertedero.

Mientras el Ayuntamiento de Orihuela ha optado por guardar silencio sobre todo este asunto, el de Guardamar, presidido por José Luis Sáez, celebró el pasado jueves una asamblea vecinal para solventar dudas. A esta reunión acudió el director general de Calidad Ambiental de la Generalitat, Joan Piquer. Ambos contestaron a todas las preguntas que formularon el más de medio centenar de vecinos que acudió a la reunión.

El regidor consideró que se empezarán a abordar cuestiones sobre este asunto en el pleno de marzo y avanzó que el próximo miércoles visitará el municipio el secretario autonómico de medio ambiente, Juliá Álvaro, para desplazarse a la ubicación prevista para la planta y mantener una reunión el Gobierno local.