El grupo Cambiemos Orihuela anunció ayer que volverá a trasladar al Parlamento Europeo la batalla para proteger Cala Mosca y evitar que se construyan 1.500 viviendas en el último kilómetro de litoral virgen del término municipal . Lo que quieren conseguir es que se revise si el estudio de impacto ambiental y la modificación del proyecto que se hizo son suficientes para proteger diversas especies de flora y fauna. Ellos mantienen que no es así.
La edil Marta Guillén explicó ayer que esta petición se llevará a Bruselas a través de la eurodiputada de IU Marina Albiol. Pero las acciones de Cambiemos no se quedan ahí. La concejala apuntó ayer que su grupo presentará alegaciones al Estudio de Impacto Ambiental y al proyecto de urbanización de ese área, y también pedirá a la Generalitat que proteja la zona en el nuevo Pativel.
Guillén se basó en dos argumentos para realizar estas peticiones. El primero, basado en criterios socioeconómicos, pone en duda que el crecimiento urbanístico sea sinónimo de desarrollo económico, puesto que «sólo se enriquecen unos pocos». Además considera que no está justificada la demanda social para levantar 1.500 casas y que la Costa adolece de infraestructuras y servicios para dar cabida a más residentes. De otro lado apuntó a los criterios ecologistas, y dijo que no se ha tenido en cuenta que hay flora y fauna catalogadas como vulnerables, ni la condición de microreserva de la que goza parte del enclave, ni la Cañada Real que transcurre por el mismo.
