Las relaciones entre la concesionaria de basuras de Callosa de Segura, Sirem y el Consistorio continúan volviéndose cada vez más tensas desde que el Ayuntamiento municipalizara el servicio hace unas semanas. Tras la decisión, el Consistorio denunció que la empresa había cambiado contenedores por otros viejos y rotos como represalias.

Tras esto, la mercantil ha emitido un comunicado a los medios en el que asegura que la deuda del Ayuntamiento de Callosa con la mercantil asciende a 2.565.162,95 euros. Además, la empresa asegura que ha citado al edil de Hacienda, Rubén Manresa, a un acto de conciliación previo a una querella criminal por un supuesto delito de injurias o calumnias graves con publicidad, por sus palabras durante la sesión plenaria del 30 de junio, en las que afirmó que «la empresa que no está prestando el servicio, al lado de la empresa que estaba robando dinero a todos los callosinos, estábamos pagando un dinero por el servicio que no nos estaban prestando y no nos lo decían».

La polémica radica en que el Ayuntamiento pidió en dicha sesión que Sirem devolviese 54.215, 31 euros que cobraba a la localidad por la limpieza de la pedanía de La Callosilla, cuando no presta ese servicio.

Llama la atención que Sirem haya esperado hasta ahora para explicar dicha circunstancia, y en el comunicado apunta a que la limpieza de La Callosilla viene realizándose por el municipio de Orihuela «por razón de un acuerdo existente con el Ayuntamiento de Callosa de Segura en virtud del que éste (Orihuela) se hace cargo de la limpieza y mantenimiento de un colegio municipal al que acuden, muy mayoritariamente, alumnos «oriolanos».

Por tanto, aseguran que «los vecinos de La Callosilla no han pagado nunca el servicio ni a Callosa ni a Orihuela», por lo que rechazan tener que devolver esta cantidad a las arcas municipales.