El equipo de gobierno del Partido Popular (PP) de Orihuela aprobará en dos semanas el presupuesto para 2016, pero su entrada en vigor será «in extremis»; previsiblemente durante las dos últimas semanas de diciembre. Los diferentes grupos políticos que forman el Consistorio están convocados a una comisión de Hacienda para mañana en la que el equipo de gobierno expondrá el proyecto, con el fin de llevarlo a un pleno extraordinario para mediados de este mes, según apuntó ayer el edil de Hacienda, Rafael Almagro. Sin embargo, los plazos de alegación y su posterior resolución harán que la aprobación definitiva llegue la última semana de diciembre, según reconoció ayer el propio edil.
De este modo, el equipo de gobierno renunciará a comenzar 2017 con un presupuesto en vigor para ese año, pese a que hasta hace tan solo unos días Almagro sostenía que sí sería una realidad y por «un compromiso personal con el alcalde», Emilio Bascuñana, que, al parecer, no se cumplirá finalmente. Aun y así, el titular de Hacienda manifestó la importancia que tiene para las cuentas municipales comenzar el 2017 con un presupuesto prorrogado del 2016 y no el de 2012, como ha sucedido hasta ahora, pues el documento que se aprobará en diciembre «se ajusta a la realidad económica» del Ayuntamiento.
Para empezar, el tardío presupuesto de 2016 contempla en el capítulo de inversiones hasta 75 millones de euros, 7 millones más de los 68 millones que se recogían en el presupuesto de 2012 prorrogado hasta hoy. «Esto permitirá hacer frente a las deuda financieras», al ajustarse el presupuesto a la realidad económica actual. El documento que se llevará a pleno en dos semanas dista mucho del que se presentó en el Ayuntamiento a finales del año pasado, con vista a aprobarlo a principios de ese año, debido a que «ha habido que ajustarlo a la realidad, para que los números se correspondieran con las letras», lo que ha obligado a renunciar a inversiones como la rehabilitación del Palacio de Rubalcava o la finalización del Centro Cívico de La Aparecida.
Pagos
El pago de sentencias y otros imprevistos es lo que ha obligado a renunciar a cualquier tipo de inversión, por lo que el capítulo destinado a este fin tan solo contempla «las obras que ya habían sido comprometidas o que están sujetas a subvenciones de la Diputación».
Sin embargo, apuntó a que estas inversiones a las que se ha tenido que renunciar sí se contemplarán en los presupuestos de 2017, que ya se están elaborando y que «esperamos que no se demoren mucho más allá de enero». El hecho de que no estén listos es lo que ha llevado a presentar los presupuestos de 2016, aunque sea tan solo para prorrogarlos una semana después.
«Para que todo el mundo me entienda, no es lo mismo llegar a Nochevieja y ponerte un traje de hace cuatro años que se ha quedado pasado de moda y no te viene al ser unas tallas menor, que uno de la temporada pasada, que es más reciente e igual hasta te cabe», apuntó Almagro.
Con esta explicación quiso explicar que los números que se recogen en el presupuesto de 2016 serán válidos para comenzar el año con normalidad, pues también apuntó a que se ha incrementado la partida para el servicio de recogida de basuras, rescatado en la anterior legislatura y que dará aire «a una dotación que arrastramos desde hace cuatro años y que ya nació con una partida insuficiente».
Alegaciones
La aprobación por parte de la junta de gobierno del presupuesto de 2016 tuvo lugar en una sesión extraordinaria en la tarde del lunes.
A partir de entonces, la oposición se encuentra examinando el documento del presupuesto, al que no habían tenido acceso hasta ahora -a excepción de Ciudadanos, con quien el PP mantiene un acuerdo de gobernabilidad-, con el fin de elaborar las alegaciones pertinentes.
Sin embargo, todo parece indicar que caerán en saco roto, teniendo en cuenta el mencionado acuerdo entre el equipo de gobierno del PP y C's, por lo que será un mero trámite. Desde el PSOE y Cambiemos Orihuela, han criticado en numerosas ocasiones no haber podido acceder al documento, que lleva cerca de un año en los cajones de Alcaldía por lo que no han podido desgranarlo hace poco más de dos días y medio. Toda una carrera contrarreloj pues se trata de centenares de folios que tendrán que revisar hasta mañana.
