Callosa de Segura mostró ayer la cultura del cáñamo de la localidad, su «patrimonio inmaterial», aprovechando la presencia de numerosas personalidades relacionadas con el patrimonio inmaterial y de la UNESCO debido a las representaciones extraordinarias del Misteri d'Elx en la zona, declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. El objetivo pasa por acelerar la «inminente declaración de Bien de Interés Cultural», y aprovechar al presencia de diferentes organismos estatales y autonómicos para forzar que se contribuya a su conservación. De hecho, a la visita realizada ayer por todo lo que comprende la cultura del cáñamo, la escuela, el museo y la arquitectura industrial del cáñamo, se unieron incluyo representantes del gobierno de Marruecos y consejeros de cultura de Murcia, pues en la capital vecina se ha celebrado estos días un congreso para declarar Patrimonio de la Humanidad los trabajos alrededor del esparto, señaló ayer Francisco Roque Albert, fundador del Museo del Cáñamo.

Así, cerca de 60 personas, entre los visitantes y los encargados de mantener viva la artesanía del cáñamo tal y como se practicaba antaño, participaron en esta particular visita que esperan sea un paso más para que no caiga en el olvido y su artesanía siga pasando, generación tras generación como hasta ahora.