Los vecinos de Callosa de Segura se sumaron ayer en masa a la segunda marcha urbana por el municipio a favor de la Asociación Española Contra el Cáncer, con el fin de mostrar su solidaridad con la entidad y poner su granito de arena en la obtención de fondos para la investigación destinada a acabar con esta enfermedad.
Centenares de personas se sumaron a una marcha que partió desde el Jardín Glorieta para recorrer las calles de la localidad. Así, se sumaron familias enteras, pues el fin de la marcha era abrir la participación a cuántos más vecinos posible. Padres con sus hijos, hasta en los carritos, abuelos con sus nietos y grupos de amigos. Hasta las mascotas tuvieron cabida en esta jornada familiar para llenar las calles de Callosa de una auténtica marea rosa.
La jornada también sirvió para recordar tanto a los que han superado esta enfermedad, tras una larga lucha, como a los que, por desgracia, ya no están. Un recuerdo que muchos escenificaron entre las decenas de globos que acompañaron a los asistentes.
Lazos rosas, mochilas, gafas y pulseras fueron otros de los objetos que se pusieron a la venta para colaborar con la entidad y dar fuerza a esa marea rosa, cuyas reivindicaciones se hicieron efectivas con la lectura del manifiesto de la Asociación Española Contra el Cáncer. En definitiva, un evento que sirvió para unir a los callosinos en un frente común, contra una enfermedad que prácticamente todos, de forma directa o a través de un amigo o familiar, han vivido de cerca.
