El Ayuntamiento de Orihuela, a través del área de Hacienda, reservará una partida de 100.000 euros en el presupuesto general «para atender la estimación de posibles reclamaciones de improcedencia de anulación de alguna de las obligaciones que han sido objeto de anulación», según recoge igualmente del Boletín Oficial de la Provincia (BOP) en su publicación relativa a la prescripción de esta serie de deudas. Dicha partida se consignará con cargo al fondo de contingencia y se pretende incluir en el presupuesto de 2016, que todavía no está aprobado, cuando restan poco más de dos meses para que termine el año. Ahora el Ayuntamiento modificará la cuenta general del año 2015 para eliminar las deudas prescritas y que el informe se ajuste a la realidad económica.