La Policía Local de Orihuela tuvo que rescatar ayer a un perro que había sido arrojado a un contenedor en las inmediaciones del centro comercial Ociopía. Un trabajador de limpieza fue el encargado de dar la voz de alarma al escuchar los arañazos del can en su intento de huir. Al estar vacío y no poder atraparlo, llamó a los agentes que tumbaron el contenedor. El animal huyó asustado por lo que se ha pedido la colaboración ciudadana si es visto para que los servicios municipales comprueben su estado de salud y ofrezcan la atención veterinaria si fuese necesario.