Cambiemos Orihuela llevará a pleno una moción que propondrá un plan trasversal que implique a varias concejalías e incluya un proceso participativo para acometer reformas en el casco histórico. Su finalidad es revitalizar este espacio «más allá de las meras reformas arquitectónicas». El plan incluiría acciones en distintos ámbitos, como intervención sobre el patrimonio arquitectónico; intervención sobre el conjunto urbano; revitalización urbana, cultural y económica; integración social; y participación ciudadana en todo el proceso.

La concejala y arquitecta de formación, Marta Guillén, mostró ayer la preocupación de Cambiemos sobre el uso que se le pueda dar a los fondos para el Desarrollo Urbano Sostenible Integrado (DUSI) a la hora de acometer acciones sobre el casco histórico con una inversión de 20 millones, de los cuales la mitad estarán financiados por Europa. Guillén propuso «que haya una decisión colectiva sobre la estrategia que se va a llevar a cabo, que se articulen herramientas de evaluación y control público sobre qué proyectos se priorizan, y que el dinero se distribuye lo más equitativamente posible en relación a todas las necesidades que acumula el centro y no va a parar sólo a unos proyectos determinados y a unas manos concretas».

La moción plantearía la necesidad de la constitución de un equipo técnico multidisciplinar, seleccionado mediante concurso público, que trabaje junto a los vecinos «en un proceso participativo, público, transparente y con garantías, capaz de diagnosticar las necesidades reales de la ciudadanía y responder ante ellas». El eje del trabajo de este equipo se fundamentaría en la sostenibilidad económica, medioambiental y social, prestando especial atención a los colectivos vulnerables que se pueden ver afectados por cualquier tipo de intervención urbanística, e integrando a los habitantes de los barrios implicados.

Por otro lado, la propuesta insiste en preservar los valores histórico-arquitectónicos del patrimonio, «proponiendo intervenciones que no impliquen modificaciones formales que perviertan la imagen del conjunto, y que respeten el Plan Especial de Ordenación y Protección del Centro Histórico de Orihuela y su necesaria actualización», aclaró Guillén.

En general, la propuesta «trataría de superar la dimensión estrictamente arquitectónica, relacionada con la conservación del patrimonio, que es necesaria pero no suficiente para la recuperación de nuestro centro histórico, siendo preciso introducir medidas de reactivación social y económica que doten de vida a las calles y a los edificios», concluyó la edil.