La dirección territorial de Educación abordará la propuesta del Consejo Escolar Municipal de poner en marcha el transporte escolar al Instituto de Benejúzar por motivos de excepcionalidad. El Ayuntamiento acogió ayer una reunión extraordinaria del Consejo Escolar Municipal para intentar dar una salida a la falta de transporte escolar para los alumnos del instituto. La mayoría de alumnos incumple los requisitos mínimos de residir a tres kilómetros o más del centro para contar con transporte. La comunidad escolar salió a la calle hace unos días para exigir el servicio porque la mayoría de alumnos reside entre un kilómetros y dos kilómetros y medio del centro, situado en la zona del campo de este municipio de 6.000 vecinos, cerca del paraje de la pilarica. Los alumnos viven lejos y además el itinerario para acceder, una carretera de un solo carril sin aceras, no es segura. Y esas condiciones de inseguridad son a las que se quiere acoger el AMPA para lograr el transporte. La Generalitat contempla la excepcionalidad de otorgar el servicio cuando el camino para acceder al centro es inseguro. En el caso de otros municipios donde tampoco se cumplía el requisito de la distancia, la Generalitat ha aceptado una parte de las solicitudes.

El centro se puso en marcha en 2004. Durante sus primeros años de actividad el transporte estuvo gestionado por la Asociación de Padres de Alumnos, que recibía una subvención del Ayuntamiento. En 2007 la Generalitat asumió el servicio sin coste para los alumnos beneficiarios, entre 150 y 200, con hasta cuatro autobuses. En 2012, con las restricciones legales al gasto público se suspendió este transporte. Durante estos últimos cursos la comunidad escolar del centro ha asumido el transporte en vehículos particulares, a pie o en bicicleta. Este año, sin embargo, ha reclamado, incluidas concentraciones, con el apoyo del Ayuntamiento que se dote el servicio atendiendo a las condiciones del recorrido que se tiene que realizar.

El alcalde Antonio Bernabé (PP) explicó que en caso de que la Generalitat no atienda la petición siempre estará la alternativa de intentar articular una ayuda económica a la Asociación de Padres para que contrate y gestione el servicio. Algo que rechaza la comunidad de padres porque el coste que supondría para las familias, y que no todas podrían asumir.

Sin urbanizar

El primer edil también aclaró ayer que el Ayuntamiento, al margen de la resolución final de la Generalitat, sí contempla realizar un proyecto dotado de unos cien mil euros, que permita mejorar la seguridad vial del itinerario con señalización reflectante. El Ayuntamiento lo que no puede abordar, matizó, es un proyecto para duplicar el vial hasta los dos carriles. Algo que implica expropiaciones de suelo.

En este sentido recordó que fue la Generalitat la que en su día aceptó estos terrenos para ubicar el Instituto, sin que la zona estuviera urbanizada -es decir, con infraestructuras y servicios mínimos como aceras y alumbrado, entre otros-. Y no parece por las previsiones de la revisión del Plan General que se pueda abordar en un plazo inmediato porque las previsiones de crecimiento de ese plan, exigidas por la ley urbanística valenciana, son muy limitadas y excluyen esa zona.