El Ayuntamiento de Torrevieja y la Agencia Tributaria llevan meses trabajando para que se produzca la cesión gratuita del edificio de Aduanas que está en la zona del puerto de la ciudad para que pase a formar parte del patrimonio de Torrevieja, según ha anunciado explicado el alcalde, José Manuel Dolón (Los Verdes).

Con motivo del 75º aniversario de la inauguración del edificio, que se cumplió el pasado 30 de julio, el concejal de Presidencia, Domingo Soler, visitó sus instalaciones en Torrevieja acompañado del historiador Mariano Galant, y a partir de ese momento ha mantenido distintos encuentros con responsables de la Agencia Tributaria en Alicante para negociar el acuerdo que haga posible el traspaso de esta sede a la ciudad.

El objetivo inicial es que sirva para recibir a las visitas más representativas y albergar al Patronato Municipal de Habaneras, organizador del Certamen Internacional de Habaneras y Polifonía de Torrevieja, que ya ha cumplido su 62ª edición y es el símbolo más internacional de su Cultura.

Con este acuerdo, la ciudad de Torrevieja garantiza la conservación de un edificio que es emblemático y está situado en una zona privilegiada de la ciudad, en el centro del casco urbano, en el acceso al Puerto, además de enriquecer su patrimonio.

De momento, no se especifican las condiciones de una cesión que contemplan entregar un edificio de dos plantas y grandes dimensiones y que además necesita reformas.

El edificio fue inaugurado por el alcalde Cesar Mateo Cid en 1946. Es el único inmueble público de Torrevieja que mantiene el escudo preconstitucional franquista en su fachada. En su día desarrollaba una gran actividad en el control del pago de aranceles de los barcos procedentes de otras nacionalidades que llegaban a cargar a sal a Torrevieja. También en el control y vigilancia del contrabando que desarrollaba la flota pesquera cuando faenaba en aguas marroquíes de Larache. El edificio de grandes dimensiones, levantado o sobre un solar de 450 metros cuadrados, es uno de los más característicos de la ciudad, aunque sigue escondido tras la valla de obra que separa el paseo de La Libertad del recinto portuario.

Durante el anterior mandato municipal se planteó la posibilidad de que el edificio acogiera una oficina central de la Policía Local, tras su adecuación, sin especificar que esta necesaria la cesión previa.