Callosa de Segura fue anoche invadida durante cerca de dos horas por dos bandos históricamente enfrentados, pero que ayer sólo tenían cabida para la diversión. Tanto los moros como los cristianos ofrecieron un espectacular desfile en el que exhibieron sus mejores trajes y donde la música animó el recorrido.

Primero fueron las dos comparsas moras las que abrieron el desfile, los Benimerines, con sus abanderadas María García y Rosa Albert; y los Sarracenos, cuya bandera la llevó con orgullo Lidia Molina. Al frente, el capitán Moro, Francisco Aledo.

Tras su paso, los cristianos tomaron las calles de Callosa. Los primeros del bando de la cruz fueron los Corsarios, comandados por el capitán Cristiano, José Miguel Martínez y cuya abanderada este año es Noemí Martínez. Llamó la atención el barco con el que desembarcaron en la ciudad los más pequeños de esta comparsa.

Les siguieron los Contrabandistas, con sus cargos Briony María Berna, como abanderada infantil; y Mayte Ramón Barberá, como abanderada mayor. Los Caballeros del Cid pusieron la nota de color y desfilaron mostrando sus armas.

Los últimos en hacer el recorrido fueron los Estudiantes, que cuentan con un cargo especial, el Alcalde de Letras, que ostenta Rafael Sánchez, a quien le acompañaron las abanderadas, Almudena Manresa y Ángela Sánchez.