El gobierno valenciano podría actuar en la mejora de las estaciones depuradoras para mejorar la reutilización de aguas residuales. Fue una propuesta de las que se escucharon ayer en la reunión que mantuvieron en el Juzgado de Aguas de Orihuela los representantes de las diferentes comunidades de regantes y a la que se sumaron los diputados socialistas David Cerdán y Manuel Pineda que tomaron nota de sus reivindicaciones, entre ellas ésta, para llevarlas a Valencia donde gobierna su partido en coalición con Compromís y el apoyo de Podemos.

Los diputados vieron con muy buenos ojos esta propuesta que partió, precisamente, del presidente de la Federación de Comunidades de Regantes, José Antonio Andújar. Para ello, habría que llevar las estaciones depuradoras de la comarca a un nivel terciario, lo que depende del Consell.

Los socialistas señalaron que se ponían «del lado de los regantes tradicionales» quienes, dijeron, «tienen unos derechos que son inviolables». Cerdán acusó al PP de «engañar con el Memorándum del Trasvase Tajo-Segura», aunque, reconoció que no era suficiente bajar el límite trasvasable de 400 a 240 hectómetros.

Cerdán también propuso que el coste eléctrico de las desaladoras lo pagaran todos los españoles en el recibo de la luz «como se paga el carbón y no lo utilizamos todos. Sólo supondría una milésima parte del coste», señaló, lo que supondría liberar un 25 % de agua del trasvase que se usa para beber, ya que considera que las desalinizadoras deberían usarse sólo para consumo humano y no para regar.

Pineda, por su parte, indicó que la Vega Baja presenta un déficit hídrico de 471 hm3 anuales, de los cuales sólo uno es en la zona de riego tradicional, los restantes son para el subsistema Tajo-Segura, por lo que los regantes solicitaron a los responsables socialistas que se arbitren soluciones para que desde el Tajo se resuelva esta necesidad.