Tras la operación supervisada por el colectivo Arca del Mar y el Oceanográfic la tortuga ha estado tres semanas en observación y una vez que se ha constatado que estaba en perfectas condiciones, que se alimenta correctamente y que nada bien, se ha llevado a cabo la suelta. En el caso de este ejemplar, la campaña de concienciación funcionó porque los pescadores de Gandía alertaron de la captura accidental del animal en sus artes de palangre. Hasta hace unos pocos años tanto los pescadores profesionales como los deportivos consideraban un engorro la captura accidental de estos animales, que están protegidos. Lo que hacían era arrojarlos de nuevo al mar. En la mayoría de los casos morían por las heridas provocadas por los anzuelos o la despresurización. Pero la actitud de los marineros ha cambiado, y el número de rescates se ha multiplicado en la Comunidad Valenciana.

El operativo partió desde el Real Club Náutico, al que acudieron Juan Eymar, técnico de protección de especies marinas de la Conselleria de Medio Ambiente; Antonio Banegas, jefe del servicio marítimo de la provincia de Alicante; el Patrón Mayor de la Cofradía de Pescadores, Pedro Carmona; el biólogo municipal y miembros de ARCA del Mar, del Oceanográfico, donde se ha recuperado la tortuga.

El biólogo municipal, Juan Antonio Pujol, explicó ayer que en el momento en el que la tortuga entró en contacto con el agua «se sumergió inmediatamente y desapareció, lo que da muestra de su rápida adaptación». En la suelta la edil de Medio Ambiente de Torrevieja, Fanny Serrano, subrayó la importancia de este acto para «respaldar» la campaña de concienciación que se está realizando sobre la pesca accidental de estos animales. Carmona dijo que los pescadores se están concienciando de la necesidad de «llevar a tierra» a las tortugas para que «puedan salvarlas, les ayuden a recuperarse y no desaparezcan».

La campaña de concienciación a las Cofradías de Pescadores de toda la Comunidad Valenciana en el que, además de la Guardia Civil, participa la Consellería de Medio Ambiente y el Oceanográfico, se ha puesto en marcha desde el Ayuntamiento de Torrevieja.

Eymar, explicó el caso concreto del accidente de esta tortuga y destacó que «el nivel de recuperación de tortugas cuando se sigue el procedimiento alcanza el casi el 90 por cien, pero si se devuelven al mar sin avisarnos muere el cien por cien».

Para facilitar la tarea de los pescadores se han colocado cubas para las tortugas y los técnicos acuden para recogerlas. Eymar recordó que «una captura accidental no tiene una sanción, tiene un agradecimiento».