La Unión Temporal de Empresas promotora del sector La Hoya de Torrevieja ha presentado los últimos procedimientos necesarios para iniciar las obras de la macrourbanización. El plan contempla la construcción de más de 7.490 viviendas sobre un millón ochocientos mil metros cuadrados. Es el último gran proyecto urbanístico que se puede desarrollar en Torrevieja -no hay terreno para más planes de ocupación de viviendas residenciales en horizontal en todo el término municipal-.

El plan fue aprobado definitivamente en 2009 por el gobierno autonómico, en plena crisis, y el proyecto de reparcelación fue autorizado por el anterior gobierno del PP en el Ayuntamiento desde febrero 2014. El pinchazo del ladrillo primero, y problemas entre las empresas que conforman la urbanizadora adjudicataria -una mercantil de Elche y una familia constructora de Torrevieja- han estado retrasando una construcción que comenzó a tramitarse a hace más de quince años, según figura en el expediente público. El proyecto necesita una inversión para la realización de la urbanización previa a la comercialización de las viviendas de más de treinta millones de euros, para el que los promotores ya tienen financiación.

Entre otros objetivos del plan en esa fase de urbanización está el de dotar de viales de capacidad para asumir una población media estimada de 23.000 nuevos residentes -en un cálculo de tres residentes por vivienda-, con un nuevo puente sobre la Nacional 332.

Otra de las características del plan de La Hoya, técnicamente denominado Sector 20, es que cuenta con una zona prevista de equipamiento comercial de más de cien mil metros cuadrados, ubicada junto a la carretera CV-95 y que albergará superficies comerciales, justo en la entrada más importante al municipio, por la que accede la mayoría del turismo residencial desde la autovía de Madrid.

Bolsa

Los terrenos de La Hoya son los únicos de entidad por superficie que quedan libres de edificación entre el casco urbano de Torrevieja y el límite con la laguna de La Mata y el parque natural. En esa zona, la Generalitat Valenciana exigió a los promotores la ubicación del principal parque del residencial, con más de 120.000 metros cuadrados.

La construcción de las viviendas, destinadas mayoritariamente a la demanda de vivienda turística extranjera, conectará a través de varios viales la zona noroeste del término -Las Torretas, San Luis,...- con la noreste -Aguas Nuevas, Ciudad Deportiva- en un continuo de avenidas y viales, según refleja la documentación del plan.

Las alegaciones de la asociación de Amigos de los Humedales sobre el impacto ambiental de una urbanización de esta entidad no se tuvieron en cuenta, aunque modificaron en algún aspecto el planeamiento, en especial, en las zonas más cercanas al parque natural.

En 2015 la Concejalía de Urbanismo aseguró que le proyecto debía agilizarse porque además los plazos corrían desde que se había presentado el proyecto de reparcelación. Es decir, el que la empresa presente los últimos trámites previos a la obtención de las licencias de obras.