La edil de Limpieza Viaria y de Residuos Sólidos Urbanos de Orihuela, Noelia Grao, salió ayer al paso de las críticas vertidas durante la última semana tanto por parte del PSOE, como por la Federación de Asociaciones de Orihuela Costa (FAOC), en cuanto a la acumulación de basuras, podas y algas en las playas que no han sido retiradas, empobreciendo la imagen turística del litoral oriolano. La edil comenzó su intervención pidiendo disculpas a los vecinos de la Costa, a los que «entiendo perfectamente», pues reconoció que el servicio es deficitario pese a que dio cuenta de las actuaciones que se han llevado a cabo desde su Concejalía para evitar un problema que, verano tras verano -y de forma menos notoria, también en invierno- desata las críticas de los residentes, pese a que se han invertido más de 350.000 euros.
Así, el Ayuntamiento ha destinado 15.000 euros para el alquiler de 90 contenedores de refuerzo del servicio de cara a los cuatro meses de temporada alta, con el fin de que la basura no se acumule en las calles. Otros 17.500 euros se han destinado a alquilar un camión recolector, mientras que el alquiler de otros vehículos de carga lateral han supuesto un desembolso de 17.350 euros. A todo esto se suma la partida de 209.000 euros para la contratación de 21 personas para cubrir las vacaciones del personal del servicio de limpieza y recogida de basuras, de forma que no repercuta en la calidad del mismo. Además, se ha ampliado el contrato de los trabajadores del servicio de recogida de los domingos y festivos, de forma que pasarán de tener el 20% de la jornada laboral al 90%, lo que supondrá «8.000 horas de trabajo adicionales al año».
Única Vía
Todas estas ampliaciones del servicio en forma de contratos menores o licitaciones adicionales al servicio de limpieza son la única vía de la que dispone el Consistorio para reforzar un servicio cuya gestión directa asumió el Consistorio en 2012, y que no se ha podido ampliar desde entonces ya que el presupuesto de ese mismo año se ha prorrogado hasta el día de hoy, ya que ningún equipo de gobierno, ni el anterior ni el actual, han aprobado una hoja de ruta económica desde entonces. Por tanto, no se ha podido invertir en maquinaria que se ha estropeado desde entonces, o en comprar más contenedores pese a que hay continuas bajas por quema de los mismos o roturas propias del uso. Lo mismo ocurre con los camiones de recogida y limpieza, al no poder hacer frente a reparaciones o compra de vehículos que no tienen solución.
De hecho, Grao apuntó a que el presupuesto de 2016, del que aún no se tienen noticias sobre cuándo se aprobará, contempla una partida de 500.000 euros para la compra de 200 contenedores y maquinaria necesaria para la recogida.
