El equipo de Gobierno de Orihuela parece dispuesto a ostentar un nuevo récord, en este caso negativo, el de incumplimiento de mociones aprobadas en pleno. En lo que llevamos de legislatura, trece meses, se han presentado 78 mociones por parte de los diferentes grupos políticos, aprobándose 54. Pero sólo cuatro han sido ejecutadas, tres de ellas, curiosamente, presentadas por Ciudadanos, el grupo municipal que sustenta el gobierno en minoría del PP. Son la comisión de investigación de Orihuela Cultural, que se ha llevado al juzgado, las ordenanzas sobre tenencia de mascotas en las playas, la devolución del nombre a la Plaza Ramón Sijé y el reconocimiento a Los Armados, esta última a iniciativa del PSOE.

Precisamente, la portavoz socialista, Carolina Gracia, anunció ayer que su grupo llevará al próximo pleno una moción para que se expliquen los motivos de esta demora. En la misma, se solicita un informe a la Secretaria del Pleno para conocer el estado de ejecución de las más de 50 propuestas aprobadas y no puestas en práctica, y que, mensualmente, se dé cuenta del estado y grado de cumplimiento de las mismas y que dicha información se publique en la página web del Ayuntamiento en el apartado de Transparencia. «Algunas propuestas sabemos que deben contar con partida presupuestario, pero muchas otras sólo dependen de la voluntad política y aquí, Emilio Bascuñana, demuestra su despotismo, bloqueando lo que se ha aprobado por mayoría», criticó Gracia.

El PP, que gobierna en minoría, es el partido que menos propuestas ha llevado a sesión plenaria en los 13 últimos meses. Es lo de menos, porque lo que ha propuesto y han apoyado la mayoría de grupos, tampoco se ha cumplido. En el pleno del pasado mes de abril, los ediles populares propusieron que la Senda del Poeta se declarara Gran Itinerario Cultural Europeo, lo que se apoyó por unanimidad. Nada se sabe desde entonces. En noviembre se elevó la reivindicación de una habitación por paciente y en el mismo saco del olvido se encuentran las propuestas populares de la elección de centro escolar por distrito único, el apoyo a los celíacos, a la educación concertada, el cambio climático o la más reciente sobre el uso impositivo del valenciano, la mayoría de ellas registradas en otros ayuntamientos por el PP.

En el limbo

Otras mociones que se han quedado en el limbo son la creación de los consejos de cultura y turismo, las obras del Centro Cívico de La Aparecida, la puesta en marcha de ecoparques, el desdoblamiento del puente de la AP7, el establecer un horario para visitar los refugios antiaéreos, el arreglo de la carretera de Villamartín, la instalación de un semáforo en La Murada, el reconocimiento al ex Síndico Domingo Espinosa o la traducción al lenguaje de signos de los actos festivos. «Sería mejor que rechazaran las propuestas a este sentimiento de frustración por incumplir», sentenció Gracia.