La imagen junto a este texto es la que se pudo encontrar un ciudadano, usuario de los servicios de la Policía Local de Torrevieja, al entrar al edificio de la jefatura. Cuatro escalones en la entrada principal, a la derecha la oficina de atención al público y, allí mismo, un agente con los pies sobre la mesa que parece echarse una tranquila siestecita. Fue hace aproximadamente una semana. En horario diurno. La imagen, al estilo de uno de aquellos espagueti western del «Nuevo Cinema», ha causado indignación y sorpresa dentro y fuera de las dependencias de la jefatura de la Policía Local de Torrevieja. Se ha distribuido rápidamente a golpe de wasap identificando al agente protagonista, interino desde hace una década, y se ha convertido en viral en las redes sociales con cartelitos, los populares «memes», que aluden entre otros montajes y chascarrillos a la «atención al público» que se realiza por parte de la Policía Local. A la vista tanto de usuarios como de sus propios compañeros -en primer término hay sillas del vestíbulo de espera-, las dependencias en las que estaba en actitud relajada este agente-al que se le han abierto y archivado dos expedientes informativos en los últimos años y que ha reivindicado consolidar su plaza sin oposición-, están situadas junto a unas oficinas en las que el teléfono no deja de sonar, día y noche, las 24 horas. Son llamadas de casos de violencia de género, problemas de tráfico, vecinos hartos de que las terrazas de restaurantes incumplan el horario, peleas en la calle o asistencias sanitarias que se incrementan de manera exponencial en los meses de verano, en el que las patrullas de la Guardia Civil no son suficientes para atender todas las incidencias que se producen en la ciudad.
El alcalde, José Manuel Dolón, delegado de la Policía Local, no se pronunció ayer sobre esta imagen que, aunque aislada, no es la mejor en un cuerpo con casi el 20% de policías de baja laboral y complicadas relaciones entre compañeros.
