Son héroes, aunque la mayoría de ellos digan que es sólo parte de su trabajo. Ayer, los socorristas de Cruz Roja que vigilan la playa de La Roqueta de Guardamar del Segura tuvieron que participar en un dificultoso rescate y consiguieron salvar la vida de una mujer de 55 años, que se metió a darse un baño junto a su marido.

El matrimonio hizo caso omiso de la bandera roja que a esa hora, pasadas las 12.30 horas, ondeaba tras cambiar el color una hora antes por el estado del mar. Las fuertes corrientes que hay en esa playa pronto arrastró a la pareja hacia el fondo. El hombre pudo salir nadando del agua por sus propios medios, no con pocas dificultades, y alertó a los socorristas de que su mujer no podía salir. Uno de ellos, desde su punto de observación ya se había percatado de que algo no iba bien y se lanzó al rescate de la bañista que trataba de nadar contra la corriente. Cuando llegó hasta ella se encontraba boca abajo e inconsciente, desfallecida por el gran esfuerzo que había realizado.

En el rescate participaron otros dos socorristas más que llevaron en volandas a la mujer hasta la playa, donde estuvieron varios minutos tratando de reanimarla y utilizando el equipo desfibrilador con el que cuentan. Había tragado mucha agua y se encontraba en parada cardiorrespiratoria. Tras unas intensas maniobras de reanimación, 10 minutos después la mujer recuperó la conciencia y fue trasladada al Hospital de Torrevieja, ya fuera de peligro. La hija del matrimonio, que estaba en la orilla, tuvo que ser atendida por los facultativos al sufrir un ataque de ansiedad. Afortunadamente, todo quedó en un susto y los héroes fueron aplaudidos y vitoreados por las más de 700 personas que a esa hora abarrotaban esta concurrida playa de Guardamar.

Verano trágico

No tuvo la misma suerte el bañista que el pasado viernes fallecía en una playa cercana a Guardamar, la ilicitana de El Rebollo. Son ya nueve las personas que se han ahogado en la provincia desde que se iniciara la temporada de verano el pasado 9 de junio. Además, los socorristas han tenido que asistir a otras 10 personas en una situación de peligro.

Cruz Roja advierte de la importancia de respetar el color de la bandera y nunca nadar a contracorriente.