Torrevieja alberga la segunda de colonia de gaviota Adouin más numerosa del mundo. El mejor argumento para que dentro de la campaña «Junio Medioambiental», con motivo de la conmemoración del Día Internacional del Medio Ambiente se lleve a cabo el anillamiento por parte de expertos, de los ejemplares de gaviota audouin nacidos en 2016, en torno a doscientos. La colonia se estableció y encontró refugio dentro del recinto industrial de las salinas de Torrevieja hace dos décadas. La edil de Medio Ambiente, Fanny Serrano presentó ayer esta actividad, que se va a realizar en colaboración con la Conselleria de Medio Ambiente y con la empresa arrendataria de las salinas, junto con el biólogo municipal, Juan Antonio Pujol. El técnico indicó que «Torrevieja cuenta con una de las principales colonias del mundo de este tipo de gaviota, con 1.730 parejas», aunque esta colonia llegó a contar con más de tres mil ochocientas parejas en el año 2010.

Con este anillado se va a obtener «información muy valiosa para la comunidad científica», ya que les permitirá conocer desde datos curiosos, como el hecho de que los ejemplares pueden llegar a vivir 25 años hasta detalles sobre su alimentación en las distintas estaciones.

Pujol señaló que a los pollos nacidos este año «se les colocarán dos anillas, una de pvc para la lectura a distancia de telescopios y prismáticos y una metálica más perdurable». El anillado permitirá recabar información fundamental para «seguir gestionando las colonias».

Estrés

Desde el año 2013 no se había realizado ningún anillamiento en Torrevieja, en esta ocasión está previsto colocar unas 200 anillas. El biólogo subrayó que en este tipo de poblaciones el anillamiento científico «tiene el valor añadido de ver cómo se establece el flujo de ejemplares entre las colonias de cría». Pujol explicó que la colonia es la segunda más importante del mundo, tras que está asentada en el Delta del Ebro.

Las primeras parejas se asentaron en la zona de decantación de yesos en 2004 -el biólogo recordó ayer que avistar este ave en Torrevieja hace treinta años era todo un acontecimiento entre los entendidos-. La colaboración de la Conselleria de Medio Ambiente, y en especial, la sensibilidad de los trabajadores salineros, permitió que la colonia, que entre otros recursos, se alimenta de descartes de la flota pesquera, en especial la sardina y el boquerón, creciera de forma exponencial. La disminución de la población reproductora se explica en su desplazamiento a otras zonas, tras poder consolidarse en Torrevieja.

La Concejalía de Medio Ambiente indicó que la actividad está restringida a «los expertos en anillamientos para evitar generar un estrés a la colonia, pero dará cuenta del desarrollo de la actividad a través de fotografías y vídeos».