La Asociación Adis Vega Baja, en colaboración con Cáritas, realiza de forma periódica un mercadillo de productos cultivados en los huertos ecológicos que los alumnos de la Escuela Politécnica Superior de Orihuela, utilizan para sus prácticas. Espinacas, lechugas, ciruelas, brevas o alcachofas pueden encontrarse en estos mercadillos que instalan en cada recolección en el propio campus y que cuenta con numerosos adeptos.

Los propios usuarios de Adis Vega Baja, la asociación que atiende a niños con capacidad en la comarca, tiene su propio proyecto educativo en el que cultiva su propio huerto. Los productos puestos a la venta tienen un valor muy inferior al precio de mercado, teniendo en cuenta que se trata de productos ecológicos. «Una lechuga iceberg que en el supermercado puede costarte 80 céntimos, nosotros la tenemos a un euro, cuando la misma, en el mercado de productos ecológicos, que es el nuestro, puede costarte más de dos euros», apunta Raúl Martínez, uno de los tres responsables de este proyecto de Adis Vega Baja.

La idea comenzó a coger forma a principio de curso, cuando los alumnos estrenaron estos huertos ecológicos que les facilitó la Universidad Miguel Hernández para sus prácticas. Al principio, Adis Vega baja ponía su propio mercadillo, y los alumnos otro paralelo, para Cáritas. Ahora, juntan existencias y la venta se realiza de forma conjunta, y los beneficios se reparten en partes iguales.

Entre las dos entidades, se han repartido más de mil euros a lo largo del año. De cara al próximo curso, esperan tener una planificación semanal para establecer un mercadillo periódico y que no depende de la recolección de cosechas. Su foco de ventas principal es la propia universidad, aunque también han tenido presencia en mercadillos en Orihuela, el Mercado Medieval, donde instalaron un puesto de plantas aromáticas, adaptándose al evento, o en la pedanía de Desamparados.

Sin embargo, es en la propio universidad, donde se cultivan los productos, donde tienen mayor tirón, dada la concienciación de profesores, alumnos y personal con la agricultura ecológica y, en este caso, también de lo más solidaria.