El Ayuntamiento de Callosa de Segura ha cerrado al tráfico una parte de la calle Rambla Baja tras detectar el hundimiento de una parte del firme. Las catas realizadas por la empresa Aqualia han revelado que se ha debido a una fuga de agua procedente del sistema de alcantarillado.

Según fuentes municipales, técnicos de la administración local y otros de la citada mercantil realizarán catas en este punto para determinar si se trata de un hecho aislado o si ha afectado a una mayor parte de la calzada.

Los primeros indicios apuntan a que el problema podrá resolverse pronto y quizá mañana se pueda reabrir al tráfico esta transitada calle.

Mientras tanto, los vecinos de la calle Salitre de Callosa siguen esperando una solución al hundimiento de la calzada en ese punto. Cabe recordar que cuatro familias fueron desalojadas de sus viviendas al detectar que han sufrido daños estructurales que amenazan la estabilidad de los inmuebles.

La Mancomunidad del Taibilla ya ha desviado una tubería que pasaba por esa zona después de que el Ayuntamiento concluyera un expediente que apuntaba que las filtraciones de agua del citado canal y otras del sistema de agua potable habían afectado al vial y a las propiedades.

Según derminó el Consejo Jurídico Consultivo, el consistorio debe responder por estos daños y será el seguro municipal el que costeará la reparación y reclamará después a la Mancomunidad de Canales del Taibilla y a la empresa Aqualia.