El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Orihuela convocó de jueves para viernes a los grupos municipales para constituir la comisión de investigación sobre las supuestas irregularidades contables y fiscales en Orihuela Cultural, tal y como se acordó en el pleno de abril. La sesión constitutiva de ayer duró dos minutos. El tiempo que tardó el alcalde, Emilio Bascuñana (Partido Popular), en informar al resto de miembros que había decidido llevar este asunto directamente al juzgado con lo cual no tenía mucho sentido la creación de este órgano cuando van a ser los jueces los que digan si existe algún reproche penal. Con esas la comisión queda en suspenso.

La decisión del alcalde pilló por sorpresa al resto de grupos municipales -a excepción hecha de Ciudadanos (C's), con quien gobierna- porque Bascuñana tiene ese informe en su despacho desde el pasado mes de febrero sin tomar decisión judicial al respecto; de hecho, el 18 de abril lo hizo público a los medios de comunicación asegurando que antes de tomar algún tipo de decisión quería la opinión del interventor municipal. Dos días más tarde, a propuesta C's, se decidió llevar este asunto al pleno y proponer la creación de una comisión de investigación que fue respaldada por todos los grupos municipales. Entre esa fecha y el día de ayer se ha conocido, precisamente, lo que el interventor piensa al respecto del encargo, que no es precisamente que tiene que llevarlo al juzgado porque la única irregularidad, entiende, es la de haber encargado a una empresa externa su elaboración, según desveló la concejala socialista, Carmen Gutiérrez.

El regidor ofreció ayer, a través del gabinete de comunicación, sus explicaciones a esta decisión. «El juzgado tiene que valorar y estudiar qué procede hacer y no tiene sentido que mientras investigue una comisión». Bascuñana añadió que la misma queda en suspenso y que «lo importante en este tema es corregir las deficiencias que habían. Se cambiaron los procedimientos para que no hubiera malas prácticas. Hay que investigar si son fallos administrativos, irregularidades de otro tipo u otra cuestión que yo no domino y dejo en manos de quien tiene que resolver estas cuestiones». El regidor reiteró que quiere que «se esclarezca y se corrija si hay responsabilidad. No lo deseamos pero estamos en la obligación de esclarecerlo. Que cada uno asuma sus responsabilidades». Por su parte, la socialista Carmen Gutiérrez contestó asegurando que «se trata de una huida hacia adelante. El PP no quiere que la comisión trabaje y queremos saber qué ha podido ocurrir en los 22 años (de Orihuela Cultura). Si querían llevarlo al juzgado, ya llegan tarde, tenían que habérselo puesto antes en su conocimiento, antes de saberlo la opinión publica». La edil consideró un paripé que se convocara la comisión para esto: «Se nos hace perder el tiempo cuando no va a tener ningún objeto. No les interesa mejorar el funcionamiento de las empresas municipales, solo titulares de Prensa escandalosos, como los de su primera comparecencia».