Es una planta de producción ubicada en Guardamar del Segura que durante sus 40 años de vida ha producido más de 110 millones de baterías para coches que se han exportado a distintos países de Europa, Oriente Medio o África. La empresa celebró ayer ese especial aniversario con sus más de 300 empleados y recibiendo la visita del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y del alcalde de la localidad, José Luis Sáez.

Se trata de una potente mercantil internacional que inició su producción en este municipio en el año 1976 y se ha convertido hoy en una de sus principales plantas de producción. Sin duda, es un importante nicho de empleo para muchos vecinos de una localidad que tiene una actividad económica muy diversificada, siendo el turismo y la agricultura sus principales fuentes de ingresos.

En la planta de Johnson Controls de Guardamar explicaron ayer que uno de sus nuevos productos es una gama de baterías dirigidas especialmente a África y Oriente medio puesto que mantienen una gran resistencia térmica y alargan la vida útil del producto incluso con temperaturas elevadas, lo que está indicado especialmente para países calurosos.