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Orihuela

El alcalde confía los problemas del pacto con Ciudadanos a Sáez Sironi

Bascuñana da Cultura a su primer teniente de alcalde sabiendo que la gestión la llevará Ezcurra (C's)

El alcalde confía los problemas del pacto con C's a Sáez Sironi

El alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana (PP), anunció ayer una remodelación del equipo de gobierno remodelación que «toca» a diez de los once concejales de su grupo al aumentar, disminuir o cambiar sus responsabilidades en áreas que, en la mayoría de casos, se pueden considerar menores, pero que en dos son de importancia: Urbanismo y Cultura, ya avanzadas ayer por este periódico. La única que sigue como está en Noelia Grao, en Sanidad y Aseo Urbano.

La influencia que el pacto suscrito con Ciudadanos, el partido que gobierna desde las sombras -toma decisiones y gestiona pero no asume responsabilidades de firma-, haya podido tener en ello parece decisivo, tanto como el hecho de que el regidor ha encontrado una salida más que digna a Begoña Cuartero, a quien colocó al comienzo del mandato en Cultura aunque ella quisiera Urbanismo. La tensa relación entre ésta y la edil de Ciudadanos, Mar Ezcurra, a quien se le colocó para ser su sombra, se ha ido deteriorando al punto de que había que tomar decisiones drásticas.

Lo curioso del caso es que el sustituto de Cuartero es un edil que poco o nada tiene que ver a priori y por perfil profesional con Cultura, como es Paco Sáez Sironi, quien si de algo puede presumir es de ser una persona conciliadora y resolutiva a la hora de afrontar problemas. Y eso es lo que ha visto el regidor. Sobre él, después de la remodelación, gravita el pacto de gobierno con el partido naranja porque también asume ya Infraestructuras, otra de las áreas que tiene «sombra» con Ciudadanos, en este caso en la persona de su portavoz, Juan Ignacio López-Bas. Con él en estos dos meses no ha habido sobresalto alguno y Bascuñana, en una jugada que no tiene visos de salirle mal, ha resuelto dos problemas que tenía sobre la mesa: Cuartero, quien se va al área que quiere y huye de Ezcurra; y Urbanismo donde, tras diez meses de gobierno, había sido incapaz como gestor de mover una de las áreas que a comienzo de mandato vendió como fundamental. Eso, dijo en su día, y sacar adelante el presupuesto.

El balance que, a preguntas de un periodista, hizo el regidor de su paso por Urbanismo lo dice todo: «¿Balance? lo que se ha hecho no es tanto de puertas afuera sino de puertas adentro. Es un área muy compleja, que está en una situación complicada en cuanto al equipo técnico. Creo que hemos hecho una regularización de algunas situaciones, lo que era importante. Y cuestiones que hemos tenido que solventar. Se ha incorporado una persona... pero se están dando pasos y, como digo, igual no tiene el reconocimiento que nos hubiera gustado pero sí se ha hecho un trabajo para que la maquina pueda funcionar». Ni una palabra del Plan General de Ordenación Urbana que está metido en un cajón desde agosto de 2014.

La remodelación de ayer, de paso, también deja al regidor más libertad de movimientos porque, aunque asume Protocolo, Relaciones Institucionales y Comunicación, ni mucho menos son comparables con el peso de Urbanismo.

Explicaciones

Bascuñana había comparecido para dar cuenta de la remodelación con cierta teatralidad con sus diez concejales, aunque él fue el único que habló y explicó este cambio de piezas restando importancia a los motivos reales y justificándolo como una adaptación; de hecho, llegó a compararse con un equipo de fútbol donde un extremo puede acabar de lateral o viceversa.

El regidor, en cualquier caso, destacó «la disposición y el compromiso de los concejales del equipo de Gobierno, que hasta ahora han realizado un magnífico trabajo al frente de sus áreas. Seguiremos en esa línea con las nuevas competencias que asumimos a partir de ahora». El alcalde dio explicaciones vagas sobre los motivos de cambios tan drásticos pero negó taxativamente que fuese por las supuestas críticas que ha sufrido Cuartero de estas, dijo, son «críticas infundadas, de manipulación y oportunismo». Críticas que habían salido en gran medida de un medio afín a Ciudadanos.

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