La dimisión del secretario del Partido Popular (PP) de San Fulgencio, Antonio Irles, no se debe a «motivos personales», según asegura ayer el alcalde y presidente de los populares, Carlos Ramírez, sino a la investigación judicial que tienen ambos abierta, según manifestó ayer en un comunicado el PSOE y APSFU que aseguran que «no ha tenido más remedio que dimitir obligado por su imputación en el caso del Club de Futbol Sporting y por la falsificación de las declaraciones juradas que firmó en las convocatorias electorales para las elecciones municipales del 2011 y 2015, en las que decía que no incurría en ningún motivo de incompatibilidad, obviando que es Policía Local y teniendo por ello incompatibilidad».

En la nota se recuerda que «un mes después de las municipales de 2011, Antonio Irles constituyó un club deportivo y durante cuatro años consecutivos el Ayuntamiento gobernado por Carlos Ramírez Sansano, sin ningún tipo de procedimiento público abierto y transparente, le adjudicó año tras año la prestación del servicio de las escuelas y actividades deportivas, dichas actividades se desarrollaban en las instalaciones municipales».

Por este asunto están pendientes ambos de saber si serán juzgados. Los dos grupos de la oposición recuerdan que «la cantidad pagada sin haber llevado a cabo ningún procedimiento de adjudicación por el Ayuntamiento al Sporting, asciende a unos 300.000 euros, habiendo mantenido en su plantilla a todos los trabajadores, fundamentalmente monitores, sin contrato», asunto por el cual lo llevaron al juzgado.