Dos de los nuevos parquímetros instalados en los últimos tres meses en Orihuela han sido arrancados y sustraído el dinero que contenían, según las informaciones recabas por este diario en fuentes policiales en los últimos días, uno de ellos el jueves por la noche. A la empresa, a la que esta semana el grupo municipal socialista le acusó de estar incumpliendo el pliego de condiciones, le están creciendo los enanos. Los nuevos aparatos son tecnológicamente muy superiores a los anteriores pues permiten muchas más operaciones, además de estar dotados de placas solares y sistemas inteligentes para la gestión de nuevos servicios. Cada uno tiene un coste de, alrededor, de 12.000 euros.

Uno de ellos fue recuperado ayer por la mañana. Los ladrones habían reventado el cajetín en busca del dinero, el otro se desconocía ayer si había aparecido. Lo curioso del caso es que los dos parquímetros sustraídos, de más de metro y medio cada uno, deben ser muy fáciles de arrancar y de transportar porque se da la circunstancia de que ambos han sido sustraídos en las inmediaciones del casco histórico y los juzgados, supuestamente más vigilado. Uno de ellos en la misma Plaza de Santa Lucía.

Mientras la Policía tiene pocos datos para esclarecer el curioso robo, se da la circunstancia de que los viejos parquímetros, puestos a finales de 2009 y que han estado rodeados de la polémica porque nunca la adjudicataria íngresó un euro en las arcas públicas por lo recaudado, lo cual ha dado origen a actuaciones municipales para cobrar alrededor de medio millón de euros por los seis años que mantuvo la contrata, nunca sufrieron un robo? al menos que se sepa.