Los ayuntamientos gobernados en minoría de la Vega Baja deberán tener muy en cuenta lo ocurrido ayer en Almoradí, donde el gobierno que encabezaba el socialista Jaime Pérez (junto a IU) veía cómo la suma de los votos de la oposición (PP y Ciudadanos) tumbaba los presupuestos para este año, que ascendían a 12 millones de euros. Ahora sólo queda por saber si María Gómez y María

Quiles, sumarán sus fuerzas para una moción de censura o permitirán un gobierno progresista con las manos atadas. El regidor no lo tiene fácil porque no es que tan sólo se rechazó el presupuesto -algo por otra parte esperado tal y como están las relaciones entre gobierno y oposición- sino que también se rechazaron las modificaciones de crédito que permiten la gestión de la ciudad con presupuestos prorrogados, que es lo único que les queda ahora.

Ayer IU criticó la situación que se ha generado por la oposición, y lo hizo a través de Juan Lorenzo Illán, quien se mostró «indignados ante la irresponsabilidad que han mostrado tanto PP como Ciudadanos, pero mayor con estos últimos, los cuales se supone que son socios de gobierno y deben facilitar el 'cambio' en las políticas que ellos mismos defendían". Según Illán, ayer ganó la «voluntad de paralizar el pueblo». El portavoz recordó que entre las partidas que quedan fuera de la modificación están «gastos como la ayuda a las familias para libros, el taller de empleo, ayudas para emergencia social, obras de saneamiento, aumento de la beca para estudiantes así como el pago de una parte del salario de los funcionarios, no van a poder ejecutarse por el bloqueo de la oposición».

Illán añadió que es sorprendente que sin embargo «planteen tanto un partido como otro mociones que afectan directamente a unos presupuestos que al mismo tiempo están frenando. Es inexplicable que tras tres meses en las que han tenido opciones para plantear en comisiones y juntas sus aportaciones o sus puntos de mejora para los presupuestos, hayan tenido una actitud negativa».