La red wifi que se instaló en Callosa en 2010 con un coste de 90.000 euros ha causado cierta polémica, y no sólo porque el contrato se adjudicara a una empresa del hermano del entonces alcalde, Javier Pérez. La instalación que debía servir para suministrar internet en plazas y parques públicos nunca ha funcionado y las antenas colocadas en diversos puntos son hasta hoy un mero decorado. m. a . r.