Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Redován

El alcalde lleva al juez una reclamación de 400.000 euros de la empresa de la basura

El consistorio alega que les cobran por realizar un servicio que el municipio ya paga a Villena

El alcalde, Emilio Fernández.

Que un juez decida si la deuda es legítima o no. El consistorio de Redován ha decidido acudir a los tribunales para resolver el conflicto que mantiene con la empresa concesionaria de las basuras y limpieza viaria, Sirem, que le reclama impagos por valor de hasta 400.000 euros que el gobierno local no reconoce como deuda. La demora en este asunto está afectando al balance económico que el municipio presenta trimestralmente a Hacienda porque se acumulan facturas impagadas a esa mercantil por estar en desacuerdo, lo que posiciona al consistorio en la lista de incumplidores con la normativa que obliga a pagar a proveedores en menos de 30 días. El equipo de gobierno anuncia que optará por acudir a la vía judicial para afrontar este problema.

Gran parte de esa supuesta deuda acumulada está siendo reclamada por la adjudicataria de las basuras por el encarecimiento que le supuso derivar los desechos del municipio a la planta de Abornasa, en Crevillent. La empresa comenzó a tratar allí los desperdicios después de que la planta de Proambiente (Orihuela-Abanilla) le cerrara sus puertas primero por supuestos impagos y después por el veto de la Región de Murcia a que se siguieran tratando allí desechos. Pues bien, Sirem comenzó entonces a llevar las basuras a la planta crevillentina y exigió a Redován que asumiera el sobrecoste por el traslado de los residuos hasta ese lugar y por el encarecimiento que suponía tratarlas allí puesto que le costaba más que en Proambiente.

Pero el consistorio de Redován alega que la empresa concesionaria se hizo con la contrata porque ofertó unos precios de eliminación de los residuos muy bajos en la planta de Proambiente y que en el contrato se fijaba que era Sirem quien se haría cargo del tratamiento de las basuras, por lo que estima que es la empresa la que tenía la obligación de pagar el coste de llevarlas hasta Crevillent. Mientras tanto, la mercantil valora que se ha producido un desequilibrio económico y que es precisamente el Ayuntamiento el que debe de hacer frente al incremento de costes. Ahora, Abornasa le reclama 102.000 euros al Ayuntamiento, pero la entidad local considera que debe de pagarlos Sirem.

Doble pago

Pero el problema no acaba ahí. Tras el cierre de la planta de Abornasa, los residuos se comenzaron a derivar a la de Villena y el Ayuntamiento sí está asumiendo directamente el coste. No obstante, Sirem le sigue girando el montante de eliminar las basuras. Además, existen otros problemas como que el consistorio ha tenido que firmar otro contrato con un vertedero de Novelda para llevar los enseres que los vecinos desechan y, según fuentes municipales, Sirem se niega a detraer de las facturas por este servicio la parte proporcional del tratamiento de esos desechos. Todo ello unido a que el Ayuntamiento estima que la empresa está incumpliendo otros términos del contrato como no disponer de una oficina abierta en el municipio, prestar el servicio con un peón menos de lo estipulado o querer cobrar el 100% de la amortización de los vehículos que utiliza cuando, en realidad, esa maquinaria se emplea también para trabajar en otros municipios. Por estos motivos, han decidido que sea un juez el que ponga orden a toda esta situación y determine quién debe asumir esos 400.000 euros.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats