La consellera de Agricultura, Elena Cebrián, aseguró ayer que la comarca de la Vega Baja recibirá una inversión de 10 millones de euros para modernizar el sistema de regadío y mejorar la optimización de los recursos hídricos en la agricultura. La medida se enmarca dentro de un plan autonómico para el que se destinarán 39,5 millones de euros, de los cuales el 25% irán a parar al sur alicantino. De igual forma, urgió al Gobierno Central a adecuar la desalinizadora de Torrevieja para que llegue a su potencia prevista y que pueda ayudar a paliar los problemas de sequía.

Cebrián anunció ayer esta medida durante una intervención para contestar a la pregunta formulada por el diputado autonómico Manuel Pineda (PSOE), también alcalde de Rafal, que se interesó por conocer las directrices de la nueva política en materia de agua. La consellera defendió que se realizará un «trabajo serio y sereno para buscar soluciones a los problemas hídricos, basadas en criterios técnicos y en una visión integral que es la que nos marca la directiva marco europea».

Así, abogó por una visión de futuro en perspectiva y de conjunto de los recursos disponibles, que «nos prepare para los retos del cambio climático, tanto por escasez de agua, como por mayor frecuencia de fenómenos extremos y cada vez más devastadores».

En cifras globales la consellera aseguró que se invertirán 130 millones en planificación de «infraestructuras pendientes y fundamentales para gestionar los recursos hídricos».